Dimite el ministro de Economía argentino en plena crisis política y con la inflación desbocada

Entre otras cuestiones, el texto oficial señala que «será fundamental continuar fortaleciendo la consistencia macroeconómica, incluyendo a las políticas fiscal, monetaria, de financiamiento, cambiaria y energética, así como la coordinación vía políticas de precios e ingresos, para atacar la problemática inflacionaria que daña al funcionamiento de nuestra economía».

El anuncio de la decisión del ministro de Economía argentino generó shock en el país sudamericano, especialmente por la ocasión que escogió para hacer pública su dimisión. Guzmán dio a conocer oficialmente que dejaba su cargo en el mismo momento en el que la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner realizaba un acto político, con motivo del aniversario de la muerte del exmandatario Juan Domingo Perón.

Justamente, el próximo lunes el ministro debía viajar a Francia para avanzar en las negociaciones con e l Club de París con el objetivo de reestructurar la deuda por 2.400 millones de d ólares que Argentina mantiene con este organismo y cuyos pagos de capital habían sido diferidos hasta 2024. La ausencia de Guzmán podría, además, afectar a las negociaciones del país con el FMI, que habían avanzado durante su gestión.

Por otra parte, el ministro de Economía era una figura polémica dentro del gobierno , ya que evidenciaba la fractura interna del movimiento. En los últimos meses, Cristina Kirchner había criticado con dureza las decisiones del ministro, mientras que Alberto Fernández lo defendía.

Con un pronóstico de inflación anual superior al 60% , dejar al barco de la economía argentina sin capitán incrementa la preocupación de los ciudadanos que ven con angustia cómo los precios crecen a diario.

Resistido por buena parte del gobernante Partido Justicialista (peronista), sostuvo que para su sustituto «será primordial que trabaje en un acuerdo político dentro de la coalición gobernante».

E n una economía acuciada por una inflación de más de 60% en 12 meses y la depreciación de su moneda, el peso, Guzmán dijo que en adelante «será fundamental continuar fortaleciendo la consistencia macroeconómica, incluyendo a las políticas fiscal, monetaria, de financiamiento, cambiaria y energética».