El caso de Elena, la niña de 4 años asesinada por su propia madre que denunció su secuestro en el colegio

Sin embargo, durante la mañana del lunes en la inspección de la casa familiar, en Mascalucia, la mujer se derrumbó y llevó a los agentes al campo donde había escondido el cuerpo de Elena . No hubo secuestro, ni agresión por parte de hombres armados. La noticia fue confirmada por el fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro: «Lamentablemente, se encontró el cuerpo de la pequeña Elena».

El fiscal ordenó la detención por homicidio y ocultamiento de cadáver. En un comunicado, los investigadores describieron un «triste cuadro familiar» con «dos exconvivientes que habían establecido nuevos lazos y no se mostraban respetuosos». «Hubo celos y violencia» y «uno de los posibles motivos que llevaron a Martina al crimen pueden ser los celos, no solo de la nueva pareja de la expareja sino también del posible cariño de la hija hacia la mujer», declaró el comandante del departamento operativo de los Carabinieri de Catania, Piercarmine Sica.

Martina mató a su hija con siete puñaladas en el cuello y la espalda . Luego cogió el cuerpo de Elena, lo metió en bolsas negras y lo enterró cerca de su casa. «Maté a mi hija, pero no sé por qué», dijo la mujer de 24 años cuando confesó, según recoge 'Il Mesaggero'. Admitió haber cometido el homicidio y haber actuado sola, una versión que confirman los investigadores que hablan de un «horrendo crimen cometido en solitario». El motivo sigue sin estar claro. «Se mantuvo vaga - explican los carabinieri - como si no se hubiera dado cuenta de lo que hizo. Es como si dijera: 'Lo hice pero no sé por qué'».

«No recuerdo si traje algún artículo de casa conmigo. Eran como las 14.30 horas, fuimos al campo que le indiqué a los carabinieri», explicó Martina en su confesión. Y luego agregó: «Era la primera vez que llevé a la niña a ese campo… Tengo la imagen del cuchillo, pero no recuerdo dónde lo conseguí. No recuerdo haber lastimado a la niña, solo recuerdo haber llorado mucho», añadió.

El abogado de la mujer, Gabriele Celesti, habla de «un dramático interrogatorio» a una «mujer destrozada que hizo algo que ni ella misma creía que podía hacer», actuando como si «alguien se hubiera apoderado» de ella, demostrando ser «cualquier cosa menos ser fría y calculadora». «Haré que mi cliente se reúna con un psiquiatra de renombre -añade el abogado penalista- para comprobar sus condiciones y luego decidiremos el dictamen pericial. Debo reconocer una gran equidad a los carabinieri y a la fiscalía».

A pesar de que el abogado niega la premeditación, «antes de ir a recoger a la niña, la mujer se hizo con una pala y un azadón y los llevó al lugar», dijo la policía durante una rueda de prensa.

«Martina Patti quería incriminar a mi hermano. Hace un año mi hermano fue acusado injustamente de un robo pero afortunadamente fue absuelto por completo. Cuando pasó de prisión a arresto domiciliario, debajo de la casa encontramos una nota amenazante con las palabras: 'Ten cuidado con lo que haces'. Mi hermano no sabe nada de nada. La madre de la niña se refirió a esta nota alegando que habían secuestrado a Elena». Es la historia de la tía de la niña. «La madre -añade- dijo que esos encapuchados se habían referido a la nota diciendo '¿no te bastó la nota? Dile a tu esposo que esto es lo último que hará: encontrar a su hija muerta'».

El padre de la pequeña, Alessandro Nicodemo se echó a llorar cerca del lugar donde fue encontrado el cuerpo de su hija. La comunidad entera de Mascalucia está en estado de shock: «Estoy conmocionado. Al escuchar la noticia me eché a llorar. Es una noticia de un drama único que nunca quisimos escuchar», declaró el alcalde Enzo Magra.