Oprah Winfrey se disculpa por promover la cultura dietética: «Me siento avergonzada»

En sus propias palabras, Winfrey expresó: «Quería reunirnos a todos porque creo que hemos llegado a un momento crucial en la forma en que hablamos y pensamos sobre nuestros cuerpos». Esta declaración marca un punto de inflexión en su postura pública, ya que durante décadas ha estado asociada con programas de adelgazamiento y cambios de imagen.

Sus comentarios llegan poco después de su participación en un especial televisivo titulado 'Shame, Blame and the Weight Loss Revolution' (Vergüenza, culpa y la revolución de la pérdida de peso), donde abordó el impacto negativo del estigma asociado al sobrepeso y la necesidad de cambiar la conversación en torno a la imagen corporal.

La historia de Oprah Winfrey está marcada por momentos cruciales que han influido en su relación con su cuerpo y la alimentación. Uno de los más destacados fue su experiencia en 1985 en 'The Tonight Show' con Joan Rivers, quien la cuestionó críticamente sobre su peso. Esta experiencia desencadenó un ciclo de dietas extremas y luchas con la imagen corporal que han perdurado a lo largo de los años.

«Compartí ese infame carro lleno de grasa en 'The Oprah Show' y ese es uno de mis mayores arrepentimientos», confesó Winfrey, haciendo referencia a un episodio en 1988 en el que mostró 30 kilos de grasa animal como representación del peso que había perdido a través de una dieta líquida. Esta revelación demuestra una profunda reflexión sobre su impacto en la sociedad y su deseo genuino de enmendar los errores del pasado.

A pesar de las críticas y el escrutinio público, Winfrey abraza esta experiencia como una oportunidad para iniciar una conversación necesaria sobre la aceptación corporal y el cambio de mentalidad. Reconoce que el proceso de construir una autoestima sólida lleva tiempo, pero insta a su audiencia a dejar de avergonzarse y permitir que las personas procesen las presiones externas que han enfrentado durante años.

En un mundo obsesionado con la imagen corporal y las dietas, la sinceridad y la vulnerabilidad de Oprah Winfrey son un recordatorio poderoso de la importancia de aceptarse a uno mismo y promover un mensaje de amor propio y aceptación. Su historia no solo es la de una celebridad, sino la de millones de personas que luchan con la presión de conformarse con estándares irreales de belleza.