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Tribeca Bistro: clásicos renovados que conquistan Madrid a precios razonables

Apertura

Este nuevo restaurante, en el local que acogió al extinto estrella Michelin Arrayán, está inspirado en la decoración de los bistros neoyorkinos. Toda su carta esta pensada para compartir

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Steak tartar con patatas fritas de Tribeca Bistro A. Delgado

Un cocinero mexicano, formado en el País Vasco, y metido a emprendedor; un joven chef catalán; y un jefe de sala venezolano. Diego Santa Rosa, Pepe Catà y Javier Utrera son la parte visible de Tribeca Bistro, un nuevo restaurante que se suma ... a la tendencia en boga por lo clásico en un ambiente desenfadado. Lo hace en un local que es un viejo conocido del sector y que dejó libre el extinto Arrayán de Javier Cabrera. Justo antes lo ocupó Hueso, una de las aperturas fallidas que también se suceden –aunque no se hable tanto– en Madrid.

Tras un lavado de cara con un estudio de interiorismo, la planta baja acoge un espacio con guiños al estilo de un bistro neoyorquino: bancos corridos y mesas altas con una barra de coctelería. También cuenta con mesas bajas y más amplias en la planta superior. Más allá del ambiente y la decoración, lo que parece tener éxito, desde que abriera hace dos meses, es su propuesta culinaria –y su precio ajustado, sin los excesos que se han impuesto en Madrid–.

Especialmente porque toda su carta está pensada para compartir platos. Desde unas tostas de gamba roja y salsa americana (6,5 euros la unidad); a un steak tartar (22) –preparado en la sala al estilo clásico y a la vista del comensal– con patatas fritas; pasando por unos mejillones (16, media 10) que también sirven con esa guarnición. Estos últimos los preparan al estilo belga con vino blanco –mejorarían con más reducción– y cortados con un golpe de nata.

Sobre estas líneas, arriba, tostas de gamba roja de Tribeca Bistro. Debajo, servicio en sala con el lenguado a la meunière. Al lado, los mejillones al estilo belga A. Delgado

Hay más clásicos en la carta. Por ejemplo, su 'croque-monsieur' (11) –no han sucumbido a la moda de llamarlo bikini–, que preparan con bechamel, comté y jamón dulce. Hay algunas pastas como los canelones de setas (16) y un arroz 'verde' con almejas (19).

Tribeca Bistro

  • Qué pedir: sus tostas de gambas, los mejillones con patatas fritas, el steak tartar y el lenguado meunière.
  • Perfecto para: comer en pareja.
  • Precio de los mejillones: 16 euros.
  • Precio de la caña: 2,75.
  • Dirección: Marqués del Duero, 5. Madrid. Domingos cerrado.

El plato más demandado hasta la fecha es el lenguado a la meunière (45, para dos personas). Hacen roastbeef (19), cordero asado (29, para dos personas) y costilla de vaca a baja temperatura (23), glaseada y con puré de apionabo.

También una chuleta empanada de cerdo (24) y una hamburguesa con salsa Café de París (18). Los postres, aunque clásicos, merecen una revisión. Están bien su mousse de chocolate y el lemon pie (7).

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Sobre el autor Adrián Delgado

Redactor de Gastronomía de ABC. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid. Máster de Periodismo de ABC-UCM.

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