«El 90% de los niños que se hacen pis en la cama tienen un motivo físico»

—¿A partir de qué edad es preocupante que un niño se haga pis?

—Normalmente los padres vienen a preguntar cuando sus hijos de 6-7 años necesitan pañal para dormir y lo desbordan por la noche. Y hay casos de familias numerosas en las que dos o tres niños se hacen pis y los padres están desquiciados cambiando sábanas. Si no se trata a estos niños el problema en la gran mayoría acaba por desaparecer salvo en aquellos que son diabéticos y por ese motivo tienen una producción de orina superior por el día y por la noche. Por detrás de los casos puede haber procesos muy importantes que necesitan un tratamiento médico.

—¿Cuáles son las causas?

—Las más frecuente suele ser la de los niños que tienen una sobreproducción de orina nocturna. Por la noche producimos el 30% de la orina del día pero estos niños producen la misma cantidad. Otro problema es el de tener una vejiga de menor capacidad, hasta un 50% y en algunos casos se juntan ambos problemas. Otras causas menos habituales son niños estreñidos, con diabetes insípida o hiperactivos. En este último caso es 6 veces más frecuente el problema de enuresis que en los niños sin hiperactividad. Lo más importante es sentarte ante el niño, empezar a ver clínicamente qué es lo que pasa y hacer pruebas para que en función de ellas se pueda establecer un tratamiento. Otro ejemplo, los niños con apnea y amígdalas tienen mayor propensión para la enuresis y cuando les operan se dejan de hacer pis.

—¿Por qué en algunos casos se tarda tantos años en ponerse en manos de un especialista?

—Lo cierto es que muchas veces no ha encontrado a nadie para solucionar el problema porque se desconoce. En el 90% de los casos de niños que se hacen pis en la cama existe una casa física, médica y solamente un 10% tiene una causa psicológica. Y erróneamente se confunde y se busca desde un principio la causa psicológica. En la mayoría de los casos ese tratamiento no funciona.

—¿Cómo se comportan los padres?

—Es importante decir muchos de los padres se orinaron también de niños porque el 90% de los casos es herencia. En su época ellos no fueron tratados y recuerdan que con el tiempo dejaron de hacerse pis. Es lo que tienden a hacer, dejar pasar el tiempo pero se debe diagnosticarlo cada caso correctamente y tratarlo para evitar a los chavales muchos años de sufrimiento. Es cierto que por el problema de la enuresis tienen muchos trastornos psicológicos y necesitan además ayuda psicológica. Tienen baja autoestima, no se socializan como el resto, con bajo rendimiento escolar. Hay casos en los que los padres optan por levantar a los niños 3 veces por la noche y el niño acaba sin descansar adecuadamente. Los chicos mayores no lo comentan, lo ocultan, y lo viven en silencio. Menos del 20% de estos niños son diagnosticados y el resto, se dejan de orinar cuando les toca.

—¿Qué tratamiento tiene la enuresis?

—El tratamiento depende de la causa. En el caso de niños diabéticos es muy fácil, cuando es diabetes insípida hay que darles una hormona, la desmopresina. Si son insulino dependientes (que se da más en los adultos) se trata con insulina. Y al controlar la diabetes, se dejan de hacer pis. Con la vejiga pequeña hacemos un pequeño tratamiento médico para que poco a poco tenga una mayor capacidad, se va adaptando. Y los que producen mucha orina, se trata con desmopresina, con pastillas sublingual y conseguimos que la producción de orina sea el 30% que la producida durante el día. Y todo se puede tratar.

—¿Cómo afecta la enuresis a los niños y jóvenes?

—No van a campamentos, no se relacionan, y solo cuando conocen otros casos se confiesan. El problema que ha existido es que han recibido castigos muy fuertes porque se pensaba que querían llamar la atención. He escuchado historias horribles, se ridiculiza a los jóvenes. Un niño se tuvo que tomar las patas traseras de un ratón. Hay un caso que dio lugar a una película, El corredor solitario. Se trata de un chaval que se hacía pis en la cama y sus padres colgaban las sábanas para que los niños lo viesen. El chico salía corriendo del cole para quitar las sábanas antes de que pasasen sus amigos y acabó siendo corredor olímpico por las carreras que se daba. Por desgracia, se piensa que hay que responsabilizar a los niños de que se hacen pis y culpabilizarlos, y eso no hay que hacerlo nunca, es una barbaridad. Ellos no buscan llamar la atención de los padres, en el 90% es una causa médica, hereditaria y es tratable.

Y otro aspecto que afecta a las familias, el económico. Hicimos un estudio de lo que supone que un niño se haga pis. Entre el lavado de sábanas, pañales y cambio de colchones, el impacto económico ronda los 1200 euros al año.

—¿Hace falta un seguimiento muy continuo?

—Les citamos cada 3 meses para ver cómo responde al tratamiento, todos financiados por la sanidad pública. En el Hospital Santa Cristina tratamos los casos a partir de los 16 años, lo cual es muy preocupante. Hace poco he tratado a un deportista de élite que usaba pañales y los tenía que llevar cuando viajaba a las concentraciones. Es importante entender que detrás de un niño que se hace pis puede haber muchos problemas médicos que hay que estudiar y tratar. Tomar conciencia y remediarlo. Hasta que estos niños y jóvenes maduran el tratamiento suele durar entre los 6 y los 12 meses.

—¿Pueden tener secuelas para toda la vida?

—Cuando esas personas no se tratan y dejan de hacerse pis con el paso de los años, al llegar a adultos se suelen levantar varias veces por la noche, les queda esa secuela, además de lo que implica sentirse ridiculizados durante tantos años. Y cuando se cura el problema, pasan de ser tímidos a ser más alegres pero hay cosas por detrás de la causa física que les marca para siempre, les afecta. Recibí a un chaval 21 años que utilizaba pañales y se hacía pis todas las noches. Estaba en cuarto de ingeniería industrial. Después de visitar muchos médicos, todos le decían que se hacía pis porque se habían separado sus padres cuando era pequeño. El pobre se pasaba noches sin dormir por miedo a hacerse pis cuando estaba fuera de casa y su madrasta le ridiculizaba en público. Psicológicamente había estado machacado y al curarse dijo «mi vida ha sido un engaño». Otro caso, una chica que se presentaba a las oposiciones de la policía y buscaba novio, porque era la forma de poder vivir fuera de la academia. No hay que olvidar que la enuresis era un motivo para librarse de la mili.

—¿En qué porcentaje es hereditario?

—Si los dos padres se hicieron pis el 75% de la descendencia también lo hará. Si se hizo pis uno de los dos la proporción es del 50%. Es curioso observar que muchos de estos niños y jóvenes se enteran en la consulta de que sus padres se hacen pis.

—Es problema es similar en otros países?

—Sí, en EE.UU hay 7 millones de niños con enuresis, en México 1,5 millones, en Argentina medio millón y en Portugal 150 mil, por poner algunos ejemplos. Hay mucho desconocimiento y es un problema del que escriben solo psicólogos y no médicos. Siempre es tratable. Pero es necesario que la gente se conciencie que hoy se puede diagnosticar y curar, que no hay que dejar pasar el tiempo. Y que cada vez existan más especialistas, que los médicos estudien y sean más sensibles más estos casos.

—¿Qué consejos da a estos niños y jóvenes durante el tratamiento?

—Evitar el estreñimiento, por la tarde no deben tomar refrescos de cola o que tengan cafeína, a partir de las 19 horas, para reducir producción de líquido y siempre antes de acostarse tienen que hacer pis. Y no se debe levantar por la noche a los niños ni decirles que paren varias veces cuando están haciendo pis porque es contraproducente para la vejiga.