La verdad sobre el caso Irina

«Irina posó desnuda para GQ, lo sabe la propia Irina, la agencia Elite, lo sabe el fotógrafo, lo saben los estilistas y los quince testigos que asistimos a la sesión de fotos.

Ante las falsedades, las injurias y las sospechas que caen sobre la revista GQ, me veo obligado a aclarar algunos puntos sobre las fotos de la modelo Irina Shayk, para salvaguardar el honor, la profesionalidad y la buena fe con la que actúa la revista en todo momento.

Acordamos con la agencia Elite una sesión de fotos, con portada, para la revista GQ. La sesión se realizó el jueves 23 septiembre. Queríamos dar el lado sexy y atractivo de una de las modelos más guapas del mundo, y también su lado humano , su formación cultural y su personalidad, por eso se acordó una entrevista.

Elegimos a uno de los fotógrafos más destacados del mundo, conocido por la calidad de sus fotos, nunca por sus escándalos, Vincent Peters . Entre sus retratos figuran nombres como Monica Bellucci, Eva Herzigova, Adriana Lima, Liz Hurley, Natalia Vodianova, Mariah Carey o Charlize Theron….

Según el contrato previo que firmamos con la agencia de modelos y que obra en nuestro poder, el compromiso con la agencia era que la entrevista fuera aprobada antes de su publicación por Gael Marie de la agencia Elite. Y así fue.

Making of de la sesión fotográfica de Irina Shayk para GQ

Tenemos el contrato, los más de 15 testigos que vieron que Irina aceptaba desnudarse para la sesión, tenemos los originales con Irina desnuda… ¿Qué más pruebas se necesitan? Los hechos, los testigos, los documentos originales, las fotos… ¿Por qué mentir por mentir?

De ahí nuestra sorpresa e indignación al ver cómo se falta a la verdad a sabiendas. Ignoramos los motivos que empujan a crear esta polémica. Pero el fotógrafo, la estilista, los asistentes, la peluquera, el maquillador, yo mismo y todo el equipo que asistió a esta sesión, que fue profesional y relajada, no entienden el motivo de tanta mentira, y los que mienten saben que mienten .

Irina no necesita photoshop y los que nos acusan lo saben. Ella no es ninguna principiante y sabe cómo posar y cuándo aceptar un desnudo y cuándo no. Un fotógrafo que hace portadas de GQ no necesita andar borrando ropa interior de las fotos. Es un cuerpo tan atractivo que lo único que necesitaba photoshop eran los desconchados de la pared de la casa de Chinchón. El resultado es magnífico, las fotos son preciosas y la modelo es una gran persona que tiene muchas cosas que contar, como podemos leer en GQ.

Afortunadamente nuestros lectores son suficientemente inteligentes para saber que la sesión de fotos con una modelo de lencería durante cerca de 12 horas (no ha sido ninguna traición a nadie), y que en esta se respira la complicidad de la modelo, así que seguimos sin explicarnos la mala fe de los que ponen en cuestión la honradez de la revista, que no ha querido sino mostrar por fuera y por dentro a una de las mujeres más hermosas del mundo.

Nuestra sensación: indignación e incredulidad.»