Urbanismo prepara un informe para rebatir las limitaciones de Cultura en el mayor barrio del PGOU de Córdoba

El alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha explicado que los servicios técnicos municipales pretenden aprovechar que el plan de sectorización O-1 es un expediente vivo, se encuentra en aprobación inicial, con el objetivo de convencer a Cultura de que cambio los límites colocados. «Lo importante es que el informe es favorable», ha dicho el alcalde.

El documento de la Junta es, en realidad, favorable a un aspecto concreto del mismo: la preservación de los bienes de interés cultural presentes en el ámbito. De hecho, los dos técnicos de Cultura firmantes usan la palabra «exclusivamente» para delimitar hasta dónde llega su opinión positiva. En la zona se encuentra un BIC, la Alberca del Cañito de María Ruiz. Lo que ha hecho Cultura es pedir expresamente que se cambie el diseño del barrio que le había remitido el Ayuntamiento tras aprobar inicialmente la propuesta presentada por los promotores.

El alcalde no solamente ha hecho referencia este viernes a la cuestión económica. Las promotoras de vivienda, sobre todo las de VPO, tienen un ingreso relevante en la venta de plazas de aparcamiento soterradas. La Junta ha pedido también que se toque lo menos posible el subsuelo y se creen terraplenes (que se eche tierra para elevar la actual cota) lo que tiene efectos sobre los costes de urbanización.

«Existe el problema de la sostenibilidad ambiental», ha dicho Bellido. El informe de Cultura pide que las reservas de aparcamiento (un mínimo de una plaza por vivienda; cantidad que se suele superar ampliamiente) se hagan sobre rasante. Bellido ha asegurado que eso tiene efectos en el barrio porque incrementa «el cemento, el asfalto, las placas» de hormigón para colocar a «miles de coches».

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El barrio está previsto para unos 16.000 vecinos (usando una ratio de 2,4 habitantes por vivienda) tras un incremento de las 2.800 pisos previstos en el PGOU a los algo más de 6.800. Cultura asegura que dicho incremento va a suponer el uso de sistemas de cimentación más agresivos dado que los edificios inicialmente proyectos tenían planta baja más dos y los que se están gestionando cuentan con planta baja más seis. Los barrios de Poniente son altamente dependientes de los traslados en automóvil.

Bellido ha recordado que la ciudad de Córdoba ya tiene experiencia en la urbanización de zonas de valor arqueológico en referencia a todo lo que ocurrió en la Ronda de Poniente, el plan O-7 (Nuevo Zoco) y el resto de barrios levantados sobre el antiguo arrabal islámico. El alcalde ha asegurado que el asunto se va a estudiar para hacer posible la preservación de restos y la creación del barrio, el mayor previsto en el Plan General. El presupuesto de urbanización asciende a algo menos de cien millones de euros.

El gobierno municipal, ha explicado el alcalde, no tuvo conocimiento previo del informe que se había elaborado en la Consejería de Cultura de la Junta para la Comisión Provincial de Patrimonio. No fue objeto, ha dicho, de una negociación y solamente se conoció recientemente, cuando se aprobó. El dictamen tiene algo más de un mes. Data del 3 de octubre.

El Ayuntamiento de Córdoba tiene la posibilidad, que no la obligación, de mandar a representantes a esta comisión para intervenir exclusivamente en los asuntos que le atañen (en la celebrada en septiembre estuvo la jefa de Licencias). La comisión está formada por cargos políticos y técnicos de la Junta y alguna entidad externa como la Universidad de Córdoba o el Colegio de Arquitectos.

El alcalde realizó estas declaraciones en la presentación del proyecto de mejora de la superficie para aparcamientos ubicada en la calle De los Plateros, junto a las instalaciones deportivas municipales de Valdeolleros. El Consistorio ha previsto unas obras de dos meses y 170.000 euros de presupuesto que mejorarán la actual situación del terrizo.

Según el concejal de Movilidad, Bernardo Jordano, se cambiará el vallado perimetral, las zonas de acceso, la iluminación, el pavimento y se plantará arbolado, unos 40 almezos que deben llegar a los 3,5 metros de altura. Las obras deben servir para evitar futuros problemas de encharcamiento de la zona donde se encuentran los vehículos y se creará una preinstalación para colocar un cargador para coches eléctricos en un futuro dentro de un plan global.

La zona permitirá, con la ordenación prevista, 191 plazas de las que cinco son para personas con vehículos con la acreditación de movilidad reducida. El proyecto está previsto para su contratación, lo que tardará unos cuatro meses, más dos de obras.