El gasto en desempleo crece un 27% con 500.000 parados menos
El incremento de la cuantía media de las prestaciones en casi un 30% en un lustro presiona al alza la factura mensual
El Gobierno ultima una reforma de los subsidos que elevará los desembolsos
Cambios en el subsidio por desempleo: cuánto aumenta la cantidad, requisitos y quién lo puede solicitar
La brecha entre salario público y privado cae un 24% en dos años
La ambición reformista de Díaz anticipa una batalla con las empresas
El Gobierno ha comenzado a pisar el acelerador legislativo una vez despejados los designios de la investidura de Pedro Sánchez con las miras puestas en el mercado de trabajo. De hecho, es el gabinete dirigido por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ... el que ha planteado las primeras reformas que además de su carácter de urgencia, por estar comprometidas con la Comisión Europea, también acarrearán un nuevo impulso al gasto público, en este caso con cargo al SEPE mediante la mejora de los subsidios por desempleo que ultima el Ejecutivo.
Cabe recordar, como ya adelantó ABC, que el planteamiento inicial del Ministerio de Trabajo de cara a sustanciar el componente 23 del Plan de Recuperación que se refiere a la remodelación del sistema de protección a parados pasa por un incremento de la cuantía de las prestaciones por un lado y un ensanchamiento de la base de beneficiarios, por otro. En síntesis, medidas que vendrían a engordar la factura anual destinada al nivel asistencial de prestación por desempleo, es decir, a los subsidios. Mientras que se espera añadir a unas 400.000 personas -por la incorporación de los parados menores de 45 años sin carga familiar y del personal eventual agrario- también se prevé una mejora de las cuantías en su conjunto. Pasarían de una paga lineal de 480 euros mensuales durante un máximo de 30 meses a una versión decreciente de la misma, pero mejorada en cómputo general: la cuantía del subsidio comenzaría en 660 euros en el primer tramo, 540 euros en el segundo y quedaría en 420 euros hasta su extinción, que en el supuesto máximo continuarán siendo 30 meses.
En este sentido, parece pertinente cuestionarse en qué estado se encuentra el presupuesto destinado a estos menesteres, de cara a entender el efecto tractor sobre el gasto público que puede tener la reforma prevista para el esquema de protección por desempleo del que ya dsifrutan casi 800.000 beneficiarios en el nivel asistencial -para poder optar al subsidio se debe haber agotado la prestación por desempleo contributiva-.
En octubre de 2023, el Estado destinó un total de 1.822 millones de euros entre prestaciones contributivas y asistenciales. Supone apenas 125 millones más que el pasado, pero si lo comparamos con el inicio del periodo de gobernanza de Pedro Sánchez hace cinco años el coste se han incrementado en nada menos que un 27%.
Radiografía del gasto
en prestaciones por desempleo
Datos a octubre de cada año
Gasto
En millones de euros
3.000
2.653
2.500
2.328
2.000
1.822
1.419
1.500
1.000
500
0
2013
15
17
19
21
23
Gasto medio por beneficiario
En euros / mes
1.200
1.073
976
1.000
780
800
600
400
200
0
2013
15
17
19
21
23
Total parados
En millones
4,81
5,00
3,82
4,00
2,75
3,00
2,00
1,00
0
2013
15
17
19
21
23
Fuente: Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE)
ABC
Radiografía del gasto en prestaciones por desempleo
Datos a octubre de cada año
Gasto
En millones de euros
3.000
2.653
2.500
2.328
2.000
1.822
1.419
1.500
1.000
500
0
2013
15
17
19
21
23
Gasto medio por beneficiario
En euros / mes
1.200
1.073
976
1.000
780
800
600
400
200
0
2013
15
17
19
21
23
Total parados
En millones
4,81
5,00
3,82
4,00
2,75
3,00
2,00
1,00
0
2013
15
17
19
21
23
Fuente
Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE)
ABC
La cifra podría parecer consustancial con una mejora de los salarios por un lado, y también influenciada por uno de los cambios regulatorios que introdujo la anterior responsable del Ministerio de Trabajo, Magdalen Valerio, quien tras tomar el poder redujo los requisitos para acceder al subsidio para mayores de 52 años (entonces era para edades por encima de los 55 años) situando la cuantía en el 80% del Iprem.
Y de hecho, parece que son los cambios regulatorios los responsables del incremento del coste. Mientras que los beneficiarios a mes de octubre permanecían casi intactos respeto a la cifra del mismo periodo de 2018, en torno a 1,7 millones, las cuantías medias mensuales sí han sufrido un salto exponencial, de casi un 30% en este lustro. La prestación media se incrementado así desde los 838 euros mensuales hasta los actuales 1.073 euros.
Sin embargo, el factor que distorsiona la procedencia de la medida es que a pesar de las rúbricas positivas que el mercado laboral ha arrojado en los últimos años, con la consistente creación de empleo desde que se dejasen atrás los peores momentos de la crisis sanitaria, estas no se han acompañado de una menor necesidad de los volúmenes de protección a desempleados. Un factor que también habla de la pétrea bolsa de parados existente en España, de cerca de tres millones de personas.
Los expertos declaran la desaceleración total del empleo y prevén un estancamiento del paro a cierre de año
La temporada navideña dará un respiro tras el peor noviembre en tres años pese a que se prevé una cifra de desempleados por encima de 2,7 millones
De hecho, este pico de gasto del último lustro -quitando los peores años de la pandemia, 2020 y 2021, donde el propio golpe al empleo como la fuerte intensidad de los ERTE incrementaron el desembolso destinado al paraguas contra el desempleo hasta los 2.653 millones y 1.864 millones de euros, respectivamente- es coincidente con un volumen de parados de casi medio millón menos que en 2018. Concretamente, mientras que entonces el SEPE contabilizaba 3.254.703 parados, a día de hoy estos son 2.759.404, es decir, 495.299 desempleados menos -una caída del 14%-.
Díaz garantiza el equilibrio
Con todo, cabe recordar que el sistema de protección por desempleo cuenta con recursos propios procedentes de las cuotas que se descuenta a los casi 21 millones de afiliados a la Seguridad Social para estos menesteres, y según trasladan desde el gabinete dirigido por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, el coste que se pueda generar está en cualquier caso cubierto con los excedentes de los que dispone el SEPE por estas aportaciones. Según explica el Gobierno de aquí a la conclusión del año el sistema obtendrá más de 27.300 millones de euros derivados de la recaudación por desempleo, debido, principalmente, al récord de afiliación a la Seguridad Social y a los mejores salarios, gracias a la subida del 47% del salario mínimo interprofesional y a la evolución de los salarios en la negociación colectiva.
Por su parte, el coste de las prestaciones, contributivas y asitenciales, ascendería al final del ejercicio a los 21.600 millones de euros, por lo que se espera fiananciar el exceso inevitable de gasto a causa de la reforma de los subsidios con un superávit previsto de 5.700 millones de euros.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete