El azulejo "made in Spain" se reencuentra con su gran feria en Cevisama 2023

Estamos hablando del azulejo. Según los datos de la web de su patronal sectorial ASCER, el sector supone el 2.7% del PIB industrial español, factura más de 4.800 millones de los que casi 3.700 van a parar a los mercados internacionales. Soporta más de 17.000 empleos y produce 587 millones de metros cuadrados de azulejos al año. Es el primer productor de la UE. Si ampliamos al clúster cerámico, que agrupa a azulejeras, fritas y esmaltes y maquinaria, la facturación alcanza los 7.000 millones de euros, y el empleo crece hasta los 23.000 puestos de trabajo. La práctica totalidad en la provincia de Castellón.

Más allá de ayudas, cambios de tarifas energéticas o incremento del valor aportado al cliente, lo que nadie discute es que cualquier sector, en cualquier situación, necesita seguir presente en los mercados y vender. Porque en caso contrario, sin ventas, no hay sector y la riqueza que el mismo genere.

Y, después de dos años de aplazamientos por la pandemia y por la guerra de Ucrania, el sector convoca entre el 27 de febrero y el 3 de marzo su gran feria comercial: Cevisama. Un evento que este año llega con la intención de devolver a la industria azulejera una herramienta eficiente para el abordaje de los mercados internacionales.

La feria ha logrado agrupar a más de 500 marcas del sector en un evento que ha conseguido multiplicar por cuatro las confirmaciones de presencia de compradores internacionales de alta calidad.

Y se espera una buena respuesta por parte de la demanda. Mercados como los de Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia o Reino Unido están mostrando gran interés por el evento, explican desde la organización. Y a pocas fechas para la celebración de la feria, los compradores VIPS invitados que han confirmado su presencia se han multiplicado por cuatro.

Y es que es el mercado internacional el de mayor interés para el sector. Con anterioridad a la crisis de finales de la primera década del siglo, el sector azulejero estaba mucho más volcado en el mercado nacional. Entonces se inició un camino exitoso que ha llevado al sector a colocar el 75% de su producción en los mercados internacionales.

Pero más allá de eso, el éxito de la convocatoria se centra en la potencia de la oferta. Desde Feria Valencia explican que son más de 500 las marcas que estarán presentes en el evento, «una excelente representación de los sectores del azulejero, el baño, la piedra natural...»

Una reunión que supone una oportunidad también para que el propio sector analice su situación y la exponga públicamente. Frente a los proveedores de energía, frente a las administraciones y frente a sí mismo.

La fortaleza de Cevisama se mide por su propia capacidad de atraer expositores de interés y visitantes de calidad. La mitad de los expositores son de la Comunitat Valenciana, el 20% del resto de España y algo más del 30% son extranjeros, sobre todo italianos y portugueses.

Pero hay otro indicador de la fuerza del certamen. Y es que muchas empresas, algunas tan relevantes como Porcelanosa o Pamesa, aprovechan la celebración de Cevisama para hacer sus propios eventos comerciales en sus instalaciones. Este año serán un total de diez las empresas del sector que lleven adelante este tipo de iniciativas. Algunas de ellas, lo hacen en paralelo a su propia presencia en Cevisama. Cada empresa tiene su propio calendario, pero la semana de Cevisama, todas estarán hiperactivas en el propio certamen y en sus show rooms privados.

En las semanas previas a la celebración del certamen, la industria de Castellón bombardea las redacciones de los periódicos con anuncios sobre sus presencia en Cevisama. Empresas como Emigres, Peronda, Decocer, Exagres, Roca Tiles, Griferia Tres o Poalgi apuestan públicamente por el éxito del evento. Mientras tanto, el sector sigue luchando por una bajada de tarifas, por mayores ayudas públicas y por su propia excelencia y aportación de valor, pero sin perder de vista las ventas y, especialmente, los mercados internacionales.