La agencia de rating que le quitó la triple A a Estados Unidos lanza un aviso a España
Fitch advierte de que la deuda pública española, que conserva el rating A-, más que duplica la media de endeudamiento de los países a los que la agencia mantiene en el rango más bajo de riesgo crediticio
Fitch abre la puerta a bajar el rating a España si Sánchez no garantiza una reducción creíble del déficit y la deuda
Madrid
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónLa agencia Fitch provocó una sacudida hace solo unos días en los mercados financieros globales con su decisión de retirar la máxima calificación creditica a la deuda de Estados Unidos tras dar por confirmadas sus dudas respecto a la evolución del déficit y el ... endeudamiento público en el país durante los próximos años. La degradación del rating soberano de la principal economía del mundo desde la emblemática triple A al siguiente escalón, AA+, provocó un pequeño seísmo en las bolsas de todo el mundo y también la airada reacción de la Secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, que tachó la decisión de «desconcertante».
También envió un mensaje al resto de los países sobre que no hay calificaciones intocables y sobre que la acumulación oportunista de deuda durante los años de tipos bajos y costes financieros reducidos ha terminado y los parámetros para medir la solvencia de las emisiones ha cambiado.
Fitch reafirmó el pasado mes de mayo el posicionamiento de España en el último escalón del rango de máxima calificación crediticia, la nota A-, con perspectiva estable, por el vigor del crecimiento económico, aunque advirtiendo de la necesidad de que el país aborde una senda firme y persistente de reducción de la deuda y el déficit, situados aún en niveles elevados.
Las agencias de rating advierten de los riesgos de un bloqueo político para la economía española
Bruno PérezAlertan de que una parálisis parlamentaria podría retrasar la reducción del déficit, frenar las reformas y comprometer la llegada de fondos europeos
El resultado de las elecciones del pasado 23J parece haber aumentado la inquietud de la agencia de calificación respecto a la capacidad del Reino de España de cumplir con esa senda. En su informe a inversores para analizar los resultados electorales en España, Fitch no se ha olvidado de advertir al próximo Gobierno, sea del PSOE o del PP, de que la necesidad de pactos para configurar una mayoría política que permita gobernar no debe impedir que el cumplimiento de las promesas electorales se equilibre con un proceso de reducción de la deuda.
La agencia recalca en este sentido que la ratio de deuda pública sobre PIB del país, del 112,8% según el último dato trimestral, continúa siendo la cuarta más alta de toda la Unión Europea; que se sitúa catorce puntos por encima de la que había antes de la pandemia (muy por encima del ensanchamiento que el endeudamiento público ha experimentado); y, sobre todo, que la deuda española más que duplica la mediana de deuda de los países que están en el rango más alto de las escalas de calificación crediticia de Fitch (la letra A), que se sitúa en el 50,8%, lo que constituye todo un aviso para navegantes.
Dificultades para reducir la deuda
El Gobierno mantiene que cuando finalice 2024 el déficit público estará por debajo del 3% y la deuda pública por debajo del 110% del PIB, pero Fitch no terminar de creerse esta senda. Sus previsiones apuntan a que el déficit público llegará al momento en que entren en vigor las nuevas reglas fiscales europeas (2024) en el 3,4% y que no bajará del 3% al menos hasta 2026, lo que a su juicio expone a España a caer en el procedimiento europeo de déficit excesivo en cuanto entren en vigor las nuevas reglas fiscales.
Además, la agencia de rating entiende que hay un puñado de motivos que aún podrían empeorar más este panorama. Advierte en su informe de que España tiene un margen fiscal muy estrecho, que desaconseja la adopción de medidas que supongan importantes incrementos de gasto o reducciones importantes de ingresos, pero constata por otra parte que los partidos minoritarios que pueden garantizar una mayoría de gobierno en España, Sumar y Vox, plantean medidas que o bien suponen incrementos significativos del gasto (Sumar) o bien aspiran a fuertes rebajas de impuestos (Vox).
Por otra parte, Fitch destaca también que aunque la reforma laboral y la reforma de las pensiones incluyen medidas que mejoran los ingresos y aunque el PP ha prometido medidas para mejorar la eficiencia en los ingresos estos avances podrían no ser suficientes a medio y largo plazo para compensar el coste de la indexación de las pensiones a la inflación, del incremento de los gastos asociados a la sanidad o del envejecimiento demográfico, lo que sitúa a España en una posición complicada.
La agencia desliza que solo un plan de consolidación fiscal que garantice una reducción de deuda en el largo plazo, como viene reclamando desde la hace tiempo la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal que augura la necesidad de ajustes durante la próxima década, podría mejorar la calificación de la deuda del Reino de España. Las previsiones de organismos internacionales, Banco de España o la propia Autoridad Fiscal, sin embargo, apuntan en sentido contrario y vaticinan que la deuda y el déficit dejarán de bajar en 2024.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete