La reestructuración de la red, mediante la cual el banco aumentará el tamaño medio de sus oficinas fusionando las más cercanas entre sí y que incluye la transformación de las sucursales en unas nuevas volcadas más en el asesoramiento que en la operativa común, afectará también a la plantilla de los servicios centrales.
Tras haber comunicado esos planes a los sindicatos, entidad y centrales iniciarán ahora una mesa de negociación para concretar las cifras y detalles finales del ajuste. Como ya informó ABC, la intención de la dirección es ejecutar esas bajas mediante prejubilaciones y bajas incentivadas, tal y como hizo al absorber su filial Banesto.
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