Un paseo para Nadal

Por la elección, Guy Forget ya dio a entender que daba por imposibles los puntos con Nadal . Gasquet no es aquel chaval que tanto molestaba al balear en épocas mozas. Ni siquiera le salva un revés estilizado a una mano y poderoso, en desuso actualmente. Cada vez que ataca, se pierde. Cada vez que sube, a lo loco y sin cabeza, abre una puerta y se cuelan todos en su salón (4 de 19 en la red). En su décimo enfrentamiento contra Nadal como profesional, la historia se repite . De hecho, nunca se ha visto otro desenlace, Nadal siempre le gana, también en Córdoba y con el termómetro rozando los 30 grados.

En este inicio de la serie, todavía con algún hueco en la grada y con cargos achicharrándose en el palco de autoridades, España se da por satisfecha porque suma un punto y no cansa a su héroe . Desde el principio, con rotura consolidada a las primeras de cambio, Nadal pone el piloto automático y cierra un parcial sin sabor en 47 minutos. No necesita mucho más, le basta con un poco de su instinto.

Desde el 4-3 de esa primera manga, desaparece un tenista de la plaza sin que los gritos de la animada parroquia francesa generen algún tipo de efecto positivo. Gasquet, difuminado, errático en cada golpe, caricatura de lo que se supone que es a tenor del ranking que presenta (15) , vive una tortura porque Nadal le castiga con once juegos consecutivos y el español no concede ni un punto al saque en toda la segunda manga. Once juegos, más de una hora sin celebrar nada, una barbaridad que maquilla con el 3-1 del tercer set.

Por entonces, el público ya se ha puesto en pie para hacer la ola y bailar entre punto y punto. Ferrer se acicala para una cita presumiblemente más áspera que le mide a Simon y Nadal cierra a lo grande el partido que no fue. Un paseo sin sudar. España empieza bien. "Ha salido todo bien. Era a priori complicado, he llegado al límite, pero me ha corrido bastante la pelota . Me ha funcionado bien el servicio, así que estoy contento", comentó el ganador a pie de pista. "Estaba con bastante menos energía de lo habitual. Pero el esfuerzo ha sido positivo. He jugado con la cabeza fría, sin desconcentrarme porque sabía que si el partido iba largo tenía las de perder. Es un buen inicio".