Suscribete a
ABC Premium

Fer, bajo una montaña de chaquetas rojas

Era el momento esperado. Cuando Verdasco ganó el último punto, todos se abalanzaron sobre él. La tercera Ensaladera ya estaba camino de España.

Nada más terminar el último punto, un tremendo winner de Fer al ángulo, el madrileño cayó al suelo dando puñetazos en la carpeta. En un segundo estaba enterrado ante la montaña de chaquetas rojas que se le echaron encima, una montaña humana interminable. Acasuso esperaba ... hundido, física y anímicamente, apoyado sobre la red, con los ojos llorosos mientras su capitán, Alberto Mancini, le rodeaba con sus brazos consolándole. En cuanto pudo escabullirse, Fer se fue a la red pero el argentino ya estaba en el banquillo propio intentando buscar consuelo. Hasta allí fue Verdasco para abrazarle, a él, a Mancini, a Juan Martín...

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia