Los ocho referentes del universo Ramos

El 13 de septiembre se estrenó una serie de ocho capítulos sobre su vida, en la que habla de su carrera profesional, de Pilar Rubio, de su familia, sus raíces andaluzas y de su pasión por los tatuajes.

Los tatuajes son pasión. Su piel soporta todos los instantes importantes de su vida, desde el «Puerta», dedicado a su amigo, hasta el «92.48», el minuto y el segundo de su gol al Atlético en la Champions de 2014.

Compra cuadros de Phil Frost, de Banksy y de Kat, así como esculturas de Jaume Plensa. Es un amante de la pintura contemporánea y posee una importante colección. Se interesa por la cultura. Acude a los museos en visitas privadas y en exposiciones muy específicas. Es «el otro Ramos».

Capitán del equipo y el jefe real del vestuario, es un verdadero defensor de la plantilla frente al club. Su rendimiento, actualmente, no es el de hace unos años, por una lógica cuestión de edad, pero mantiene su liderazgo con su experiencia.

Es el jefe también de la selección española, dentro y fuera del campo, el interlocutor de los jugadores. Una autoridad que ha aumentado todavía más tras la dimisión de Luis Enrique y el ascenso de Robert Moreno.

Lo ha ganado todo, un Mundial, dos Eurocopas, cuatro Champions, y ahora quiere rematar su palmarés con una medalla olímpica en Tokyo 2020. Comió el jueves con Rubiales para ver esa opción. Será una carga en su calendario.

Su intento falido de irse el pasado verano a China buscaba en realidad despertar el caso de su renovación. Cunmple 34 años en marzo, tiene contrato hasta 2021 y desea retirarse en el Real Madrid. El club esperará hasta el final.