Asensio, el reto de ganarse la renovación

Asensio sabe la situación que vive y se esfuerza por continuar en el club que le ha permitido conquistar dos Champions, con un gol suyo ante la Juventus, dos ligas, dos Mundiales de Clubes, una Supercopa de Europa y otra Supercopa de España, en la que endosó tres golazos al Barcelona. Para alcanzar su meta debe obtener una regularidad en su rendimiento. Es su asignatura pendiente.

Capaz de marcar grandes goles como el que firmó ante el Inter , no logra expresar una línea de equilibrio en su juego. Anotó tres tantos al Mallorca que le dieron la titularidad y a la semana siguiente fue relevado en el segundo tiempo, frente al Villarreal, porque no repitió ese nivel. Es su sino, sus prestaciones son un vaivén, arriba y abajo, un Guadiana de un futbolista de talento que aparece y desaparece.

Esa temporada es la de verdad y se nota. El isleño ha participado ya en dieciocho encuentros de los veintidós que suma el Real Madrid, aunque ha jugado la mitad de los minutos, pues solo ha sido titular en siete, siempre en la Liga. En la Copa de Europa ha jugado en cuatro, en lo segundos tiempos. Con ese balance, ya ha rubricado cinco dianas. El gol es el que marca su rendimiento . Poseedor de un gran disparo con la izquierda, debe haber valer es arma letal. Únicamente lleva dos tantos menos que la temporada anterior, cuando firmó siete en 48 encuentros. El cambio es claro. Debe confirmar una evolución para ganarse un nuevo contrato.

La dirección deportiva espera de él que marque con mayor asiduidad goles como el que hizo al Inter y como los tres que le hizo al Barcelona antes de su lesión. P ara renovar tiene que alcanzar esa regularidad que se le exige y Ancelotti le está dando partidos en relevos con Rodrygo para ver si la consigue.

La grave lesión de rodilla, la triada, sufrida hace dos años supuso un freno en su progresión, pero en el curso anterior al percance ya había descendido en su nivel. Solo seis goles en 48 partidos. Ahora ha de mejorar su rendimiento y ganarse un puesto que Rodrygo le ha quitado. El alta de Bale es una competencia más para esa posición del flanco derecho del ataque del líder.

Si el Real Madrid analiza, en el mes de mayo, que no debe renovarle , le traspasará, pues un año más tarde quedaría libre. La Juventus, el Milán y la Premier mantiene el interés por su fichaje.