El aciago recuerdo de España contra las anfitrionas

Unos penaltis dejaron fuera a España frente a Inglaterra en los cuartos de final de la Eurocopa de 1996. Desde los once metros fallaron dos jugadores cuyos apellidos siguen estando de actualidad: Fernando Hierro , actual seleccionador nacional, y Miguel Ángel Nadal , tío del tenista número uno del mundo Rafa Nadal. Aquella edición la ganó Alemania , quien se impuso a Inglaterra en las semifinales por penaltis y logró ganar a la República Checa en la final días después.

El Mundial de 2002 fue el primero en el que dos países ejercieron como anfitriones. Esta edición, de aciago recuerdo para España , acabó con la selección cayendo en cuartos de final contra Corea de Sur , en un partido marcado por la polémica actuación arbitral. El colegiado egipcio Al Ghandour entró tras ese encuentro en la historia negra del fútbol español. Los goles anulados a Rubén Baraja y a Fernando Morientes fueron protestados airadamente por los de Juan Antonio Camacho . El partido se fue a los penaltis, donde España cayó 5-3. El campeón de aquel Mundial fue Brasil .

Dos años después, España volvió a tropezar con el organizador del torneo. Los de Iñaki Sáez qudaron encuadrados en un grupo con Portugal, Rusia y Grecia . Tras comenzar ganando a Rusia, se empató contra Grecia. En el último y decisivo partido, la derrota frente a Portugal dejó al combinado nacional fuera de los cuartos de final. La anfitriona llegó hasta la final, donde se vio las caras contra Grecia. En la fase de grupos en el enfrentamiento entre ambos ya habían caído, y en la final fueron los griegos los que volvieron a imponerse. En aquella selección lusa jugaba un joven Cristiano Ronaldo , quien vivió en su país la primera gran decepción de su carrera.

España llegó a la Copa Confederaciones de 2013 siendo la selección que había ganado las dos últimas Eurocopas y el último Mundial. Quizá fue por esto, y por las buenas sensaciones dejadas durante el torneo, que la derrota frente a Brasil en la final fue tan dolorosa. Un contundente 3-0 dejó a España sin su primera Copa Confederaciones. Cuatro años antes, por añadir una nota positiva a los enfrentamientos contra anfitrionas, España había logrado ganar a Sudáfrica en la fase de grupos de la Copa Confederaciones celebrada este país. Aquella edición tampoco fue a parar a las vitrinas españolas, ya que Brasil se terminó haciendo con la copa y Estados Unidos apeó a España en semifinales .