La FIFA abre una investigación a los jugadores de Argentina tras la queja de la Federación de Fútbol Francesa por los cánticos racistas

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Pablo De la Varga

«La FIFA condena con firmeza toda forma de discriminación venga de donde venga, incluidos los jugadores, los hinchas y los responsables», declaró la instancia, a la que recurrió el martes la Federación Francesa de Fútbol (FFF).

Enzo Fernández, futbolista que grabó y emitió en directo el vídeo, ha pedido perdón por sus redes sociales: «Quiero disculparme sinceramente por un vídeo publicado en mi canal de Instagram durante las celebraciones de la selección nacional». «Ese vídeo, ese momento, esas palabras, no reflejan mis creencias ni mi carácter. Lo siento de verdad», se arrepiente el jugador de esta acción que salió espontánea fruto de la euforia de la celebración.

La polémica también llega a Inglaterra porque el Chelsea, club que tiene la propiedad del argentino, ha tenido que abrir un expediente disciplinario a su centrocampista. Se debe a que algunos compañeros han presentado una queja formal al equipo inglés. Entre ellos, Fofona, que ha condenado este ataque racista por redes sociales: «El fútbol en 2024: racismo desinhibido».

Lo que era una verdadera fiesta el domingo por la noche en las calles de Buenos Aires se convirtió el pasado martes en un problema que puede traer consecuencias.

El vídeo, que se emitió en directo a través de Instagram, estaba siendo visto en ese momento por más de 35.000 personas. Cuando los jugadores se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo, decidieron detener rápidamente la grabación de la canción.

La difusión del vídeo ha provocado incluso la reacción de la ministra de Deportes del país galo, Amélie Oudéa-Castéra, quien publicó en sus redes sociales: «Patético. Comportamiento que resulta tanto más inaceptable si se repite. FIFA: ¿alguna reacción?».

El periódico galo L'Equipe –líder en prensa deportiva de ese país- publicó este martes por la mañana: «Al final del vídeo, podemos reconocer fácilmente la melodía de una canción, en particular cantada en noviembre de 2022 por aficionados argentinos en directo por televisión, con connotaciones racistas y que hace referencias burlonas e insultantes a los orígenes de los jugadores de la selección francesa, apuntando en particular a Kylian Mbappé».

La canción, que hoy recorre el mundo empañando una vez más la imagen del campeón albiceleste, tiene su origen en el año 2022, en el mundial en el que Argentina resultaría victoriosa. El tema fue creado por algunos fanáticos de la selección que, al ser consultados por un medio de comunicación en Qatar, comenzaron a entonar la canción, que rápidamente despertó el enojo del periodista. El mismo cántico se escuchaba en el obelisco de Buenos Aires aquel 18 de diciembre en el que el país del tango se hacía con su tercera copa del mundo.

La letra del tema musical decía: «Escuchen, corran la bola. Juegan en Francia, pero son todos de Angola...». Y más adelante, la canción continúa: «Su vieja es nigeriana; su viejo, camerunés. Pero en el documento, nacionalidad francés».