La noche maldita de Braithwaite

Su tarde maldita comenzó a los pocos minutos del inicio del partido. Araújo se quedó tendido en el área del Eibar sin que Alberola Rojas pitara nada pero en cuando la jugada finalizó, el árbitro fue avisado por Iglesias Villanueva, árbitro encargado del VAR , de que había existido un contacto punible. Lo revisó el ciudadrealeño y consideró que existía falta sobre el uruguayo del Barcelona. En la pantalla pudo verlo más claro porque el barullo en el área le impidió contemplarlo en directo. Braithwaite cogió el balón y se dispuso a lanzar el penalti sin que Griezmann o Pjanic , futbolistas con más galones que el danés, hicieran nada por impedirlo. Lo lanzó fatal. A la derecha de Dmitrovic sin que el portero tuviera necesidad de pararlo. Braithwaite ha fallado los dos penaltis que ha chutado en la Liga. El primero se lo paró Aitor Fernández el año pasado cuando aún militaba en el Leganés. El segundo, ya con la camiseta del Barcelona, ante el Eibar. Curiosamente, Braithwaite anotó una pena máxima ante el Dinamo, en la Champions, aprovechando que Messi no viajó a Kiev. No deja de ser curiosa la mala relación del Barcelona con los penaltis. El equipo azulgrana ha marrado tres de los últimos cuatro chutados en la competición doméstica (Griezmann ante el Betis, Messi frente al Valencia y el de hoy).

La mala suerte de Braithwaite no acabó ahí. De nuevo el VAR fue protagonista en otra jugada que pudo se r decisiva y que tuvo como protagonista al danés. El delantero aprovechó una rápida jugada para anotar un gol pero en el momento en el que el balón salió de las botas de Júnior Firpo, que le dio un pase al centro del área, el azulgrana estaba en fuera de juego por centímetros . La jugada fue revisada por Iglesias Villanueva en la sala VOR y el gol fue anulado justamente. Las dos jugadas pesaron en el ánimo de Braithwaite, que sabe que tiene que aprovechar todas las oportunidades si quiere seguir gozando de minutos en el Barcelona. Aunque al principio no tuvo ningún protagonismo, las lesiones de Ansu Fati y Dembélé, le convirtieron en una pieza interesante para Koeman, que reactivó su confianza en él a partir de finales de noviembre, tras once partidos en los que únicamente sumó 45 minutos . A partir de ahí fue una pieza fija en los planteamientos del técnico que le ha concedido nueve titularidades en los últimos diez encuentros.

La segunda parte no mejoro para Braithwaite, aunque la jugada desgraciada para los culés la protagonizó Araújo. El central se lió con un balón en zona defensiva y Kike se la robó para quedarse solo ante Ter Stegen y batirle. No obstante, después de que empatara Dembélé, el danés pudo lograr el gol del triunfo, pero quedó demostrado que no era su noche. Un centro de Dembélé desde la derecha fue rechazado por Dmitrovic con los puños pero el balón golpeó en el abdomen de Braithwaite y estuvo a punto de colarse en la portería del Eibar. Salió fuera por poco, desesperando al delantero del Barcelona, al que no le salió nada.