Karembeu se pasa al «FootGolf»

A esta nueva chaqueta optaban, entre otros, Christian Karembeu . El laureado futbolista francés cuyo historial poco tiene que envidiar al de Messi o Cristiano Ronaldo fue la gran estrella del evento. No existe «putter» así que no es es golf, pero tampoco se puede hablar de fútbol cuando en 18 hoyos.

La Asociación Internacional de FootGolf (IFGA en inglés) creada en Ginebra en 2009 desarrolla unas reglas que todavía no ha dado por finalizadas, aunque la idea es sencilla: se trata de meter un balón de fútbol en un hoyo de medio metro - cavado a propósito en el campo de golf- en menos golpes que el resto. Surgió en Suecia y rápidamente se propagó por las praderas holandesas.

Parece fácil, pero no lo es. El secreto está en combinar con acierto potencia y puntería. De nada sirve colocar el balón si va demasiado fuerte. Lo saben bien Sergio Ramos o Carvalho porque lo probaron en una recreación en Valdebebas y Diego Forlán, protagonista de un anuncio de Adidas, aunque el uruguayó hizo trampas al cabecear la pelota en el «green», algo prohibido en el «FootGolf».

En España trató de explotarlo Juan Manuel Asensi , el mítico centrocampista azulgrana. Entendió que cavar en los campos de golf era un error y decidió sustituir esos enormes boquetes por diminutas porterías de fútbol. Pero su versión no cuajó en Cataluña, uno de los pocos lugares donde se practica el deporte en España, ni en el resto de Europa, donde se practica la original entre aficionados y curiosos. Varias empresas promocionan partidos entre empresas para que los empleados descarguen adrenalina.

En Holanda se disputan torneos con asiduidad y en Estados Unidos se ha formado incluso una Liga. A primeros de junio se disputará el primer Mundial de «FootGolf» de la historia en Budapest entre más de 200 jugadores. Allí podría intentar Karembeu aumentar su sala de trofeos.