Patrimonio Nacional identifica bienes suyos en el Pazo de Meirás

En total, e l informe identifica seis «bienes históricos» -aunque «hay más piezas de las reseñadas cuya calidad hace sospechar que podrían tener su origen en las Colecciones Reales»- además de enumerar distintas alfombras, porcelanas y otras piezas de mobiliario que pertenecerían al Estado, dentro de los más de 600 objetos que los técnicos de la Consellería de Cultura de la Xunta han identificado en el inventario realizado en las últimas semanas por mandato judicial , proceso en el que participó esta jefa de servicio de Patrimonio Nacional.

A petición de la Abogacía del Estado, los Franco no podrán retirar ninguno de estos bienes por mandato de la juez, que ordenó el pasado viernes su depósito judicial bajo la tutela del Estado , y solo permitirá que la familia retire enseres estrictamente personales. «Está clara la conveniencia de revisar la totalidad de los bienes, tanto de carácter histórico artístico como de los bienes de la primera mitad del siglo XX en busca de marcas de firmas de artistas y de números antiguos de inventario», destaca la especialista, que pide «prestar especial atención al mobiliario y los bronces».

Los bienes históricos serían, según se recoge en el informe al que ha tenido acceso ABC, una pantalla de chimenea, un sofá de talla dorada, una mesa vitrina, un sofá de caoba, un conjunto de escritorio y cómoda y un volumen de la Guía Real de España . Los muebles procederían de distintas estancias del Palacio Real y aparecen documentados en el Archivo General de Palacio.

Distinto es el caso de «una serie de muebles que claramente fueron creados para su adorno en los primeros años de uso del Pazo de Meirás como residencia del entonces Jefe del Estado». Todos ellos «fueron realizados por la Fundación Generalísimo Franco, Industrias Artísticas Agrupadas , a excepción de una alfombra tejida en la Real Fábrica de Madrid». Esta fundación se creó en 1941 y tenía como función «crear fábricas y talleres» donde puedan ejecutarse productos de las artes industriales de gloriosa tradición en España, como porcelanas y cerámicas, muebles y bronces, cristales y lámparas, tejidos de seda y tapices», entre otros. El ente estaba integrado dentro de Patrimonio Nacional, así como los objetos que se producían para decorar edificios oficiales.

Según la conservadora, y en sintonía con lo que puso de manifiesto la sentencia de 2 de septiembre que otorgó la propiedad del Pazo al Estado, Meirás se habría utilizado por parte de Franco del mismo modo que el Palacio del Pardo , «y requerían servicios igualmente similares tanto en lo referente a la decoración como a todos aquellos aspectos y elementos que permitían el desarrollo de la vida cotidiana, que constaba de una parte oficial y otra privada, pero que obligatoriamente compartían unos mismos espacios y unos mismos bienes muebles».

Esta forma de proceder explicaría la presencia en Meirás de alfombras salidas de la Fundación Generalísimo, algunas con la etiqueta y las siglas bordadas en su reverso, « un código alfanumérico que era identificativo del cartón que había servido de modelo para tejer la pieza». En el inventario judicial aparecen distintas alfombras «apiladas y enrolladas». La que se identifica procedente de la Real Fábrica se data con anterioridad a 1941, fecha de creación de la Fundación, «y debió ser llevada allí al inicio del uso del Pazo de Meirás como residencia de verano» del dictador, en 1939.

Es el mismo caso de las porcelanas que Patrimonio Nacional identifica en Meirás, bien dos jarrones, bien las piezas de vajillas expuestas en vitrinas de la planta baja del Pazo. En ellas se detectaron «distintas marcas de la manufactura» en función de los años en que hubieran sido fabricadas . Y también se apunta a «figuras de bulto redondo en biscuit que hay repartidas por diferentes vitrinas y sobre los muebles del Pazo, y que era, junto con los tibores de imitación china, producción fundamental de la citada Fundación». El informe singulariza dos ejemplos: una figura de Cronos y «grupos de niños llevando una cesta de tulipanes».

Hay también piezas de mobiliario, como una mesa nido «modelo clásico creado por la Fundación Generalísimo caracterizado por tratarse de una mesa rectangular que alberga en su interior 8 mesitas auxiliares de tablero circular» con adornos de talla dorada. La conservadora recomienda en su informe la revisión «de todas las alfombras y todas las porcelanas » para «buscar las marcas, etiquetas y siglados» de la Fundación Generalísimo.

Hasta la fecha, la familia Franco había sostenido que los muebles que había en el interior del Pazo habían sido adquiridos por Carmen Franco en los noventa, cuando rehabilitó Meirás después del incendio de 1978 que arrasó con buena parte de sus estancias. Del fuego se consiguieron salvar algunos enseres -como demostraron las fotografías de la época- que muy probablemente volvieran a ubicarse dentro del inmueble.

El informe de Patrimonio es un complemento al grueso del inventario judicial de los bienes localizados dentro y fuera del Pazo por los técnicos. No obstante, este documento solo los enumera, sin pararse a identificarlos de manera específica. Entre las más de 600 referencias de Meirás aparecen numerosos cuadros -principalmente obras religiosas y retratos de Franco y su familia-, esculturas policromadas, mobiliario diverso y los miles de volúmenes de la biblioteca.