Los niños cuadriplican su conexión a internet en verano

Según el director general en España y Portugal de Norton (Symantec), Salvador Tapia, la media de tiempo de conexión a la red de los más pequeños en verano aumenta hasta las 16 horas diarias, frente a las cuatro horas de promedio en invierno , y añade que uno de los grandes problemas es que las conexiones se producen a menudo sin conocimiento de los padres. Ha lamentado que los progenitores dispongan cada vez de menos tiempo para estar con sus hijos, con el agravante de que los chicos cada vez tienen a su alcance dispositivos más modernos que les permiten conectarse a internet en todo momento desde cualquier lugar.

También el responsable de soporte de consumo en Iberia de Kaspersky, Víctor Martín, ha advertido del peligro que supone el excesivo atractivo que despiertan las redes sociales en los niños y que les lleva a conocer gente no siempre recomendable. Según Martín, los padres deben extremar la vigilancia en estas fechas ante las amenazas de internet , porque la red ofrece a los menores muchas posibilidades de relacionarse con todo tipo de personas, y no sólo con amigos. Por tanto, se aconseja a los padres tomar precauciones a tiempo para evitar sorpresas desagradables, y se insiste en que «las soluciones informáticas con control parental son un gran aliado». A los niños se les recomienda no enviar información ni datos a desconocidos, y evitar citas con ellos, además de no publicar sus direcciones de correo electrónico ni aceptar ofertas demasiado seductoras en la red.

A su vez, el fundador de Adicciones Digitales , Juanma Romero, advierte de que habitualmente y más en verano los chicos intentan pasar la mayor parte del día pegados al ordenador o el móvil. «Somos los padres quienes tenemos que poner límites y ofrecer alternativas», aunque reconoce que es difícil cuando trabajan ambos y los niños se quedan al cuidado de los abuelos, «que no tienen la más remota idea de todo esto». A los pequeños se les puede apuntar a actividades o fijarles un horario de uso de las tecnologías , pero, según Romero, « nunca hay que dejarles hacer todo lo que quieran , por muy buenas notas que hayan sacado», ni permitir que estén todo el día «enganchados» al ordenador.