El PP pedirá una reunión urgente del Consejo de Política Fiscal

Esta fue la decisión que salió anoche de la reunión de urgencia que convocó Mariano Rajoy, a petición de sus presidentes autonómicos, para abordar la crisis económica y las consecuencias de la decisión del Gobierno de no presentar un proyecto de Presupuestos Generales del Estado, ni un decreto de prórroga de las actuales cuentas públicas.

Los populares argumentan que esta situación ha dejado a las CCAA sin una referencia de las variables macroeconómicas para el próximo año y, por tanto, sin una pauta con la que poder realizar los presupuestos generales de sus respectivas regiones para el año 2012. Un hecho sin precedentes en la historia democrática, como han afirmado los propios presidentes autonómicos del PP. Ya que cuando se produjo el cambio del Gobierno socialista al popular, Felipe González si realizó en 1995 un proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el año siguiente.

Por ello, los presidentes autonómicos populares, que son un total de trece, tienen previsto pedir a Elena Salgado que fije una previsión de crecimiento para 2012, que sea lo más ajustada posible a la realidad, para poder trabajar, fijar un techo de gasto y tener claro, como mínimo, un suelo de ingresos. No en vano, las CCAA dependen en gran medida de las transferencias del Estado, más del 65 por ciento de su presupuesto procede de ahí.

La petición de una previsión de crecimiento que sea realista se basa en el hecho de que la previsión que había fijado inicialmente el Gobierno para 2012 superaba el 2 por ciento, mientras que la mayor parte de los bancos internacionales, auguran que España puede decrecer entre tres y siete décimas el próximo año. Además, los presidentes regionales también desconocen cuál es la política retributiva que se debe aplicar a los funcionarios para el próximo año 2012.

Durante la reunión que mantuvieron ayer los presidentes de las CCAA gobernadas por el PP con Mariano Rajoy les pidió que mientras tanto, hagan sus cuentas públicas con los pies en el suelo, mucha prudencia y ajustándose lo máximo posible a la realidad de la situación.