Cómo enfriar una habitación sin aire acondicionado ni ventilador: los mejores trucos
La ola de calor está azotando a casi toda España y refrescarse tanto fuera como dentro de casa es el principal objetivo de cualquier persona
Cómo ahorrar con el aire acondicionado en plena ola de calor y que no se dispare la factura de la luz
Aún no ha pasado ni una semana desde que llegó la época estival pero el calor ya es tan intenso como si fuera pleno agosto. Después de semanas de tormentas y lluvias que parecían no cesar, las altas temperaturas y el sol abrasador han llegado ... casi de golpe, dejando una ola de calor sofocante en casi toda España.
Con temperaturas entre los 35 y los 40 grados o más en numerosos puntos del país, todos buscamos cómo librarnos del calor. Así ir a la piscina o la playa, beber agua fría, buscar la sombra, vestir con ropa fresca y recurrir al ventilador o al aire acondicionado, suelen ser los remedios más fáciles, populares y repetidos entre la población.
Refrescar la casa es una tarea que se va a repetir cada día mientras dure el calor y, a veces se vuelve complicado. No todas las personas se pueden permitir tener un aire acondicionado o un ventilador en cada habitación, además, utilizarlos constantemente supone un gasto energético enorme que se refleja en el encarecimiento de la factura de la luz.
Si eres de los que necesita refrescar la casa pero no cuentas con estos elementos o quieres ahorrar en la factura de la electricidad, te dejamos algunos consejos para enfriar las habitaciones de tu casa sin mucho esfuerzo y de forma fácil y económica.
Así puedes enfríar una habitación sin ventilador ni aire acondicionado
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Mantener las persianas bajadas y las ventanas cerradas durante el día: las horas de sol son más numerosas en verano, así que será mejor que no dejemos entrar los rayos por las ventanas. Así no se calentarán los cristales, que emiten mucho calor, ni nigún elemento de la estancia.
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Abrir las ventanas por la noche: por el contrario, una vez se ha escondido el sol es el momento en el que más suele refrescar. Para aprovechar esto, abrir las ventanas de la casa permitirá que entre algo de fresco. Icluso, con suerte, si hay alguna brisa se producirá algo de corriente en casa al estar varias ventanas y puertas abiertas.
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Desenchufar aparatos eléctricos y apagar las luces: si hay varios electrodomésticos u otros elementos eléctricos que no estés utilizando, lo mejor será que los desconectes de la corriente. Aunque estén apagados, la elctricidad circula por ellos y pueden emitir calor. Lo mismo ocurre con las luces, sobre todo si no son de bajo consumo.
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Fregar los suelos con agua fría: aunque pueda parecer una tontería pero, sobre todo a la hora de dormir, que no vamos a caminar por la casa, si antes fiegas el suelo con agua fría, conseguirás bajar la temperatura de forma rápida. El suelo retiene calor duranet el día y, al enfriarlo con el agua, conseguiremos un efecto sauna a la inversa que dará sensación de frescor.
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Colocar plantas que absorban el calor: no es ningún secreto que la vegetación ayuda a disminuir las altas temperaturas. Algunas de las plantas que más ayudan en esta tarea son el aloe vera, la lengua de tigre, el poto o el helecho de Boston, entre otras.
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Poner recipientes de agua fría: así como las fuentes ayudan a refrescar las calles, colocar algunos cuencos de agua fría o similares en la habitación a enfriar también ayudará a que haga menos calor.
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