Un adolescente de 13 años, condenado a cadena perpetua en China por un crimen que ha encendido las redes con más de mil millones de visitas en un día

Desde su detención y el salto del caso a los titulares de los periódicos locales se desató una agria polémica en las redes sobre el tratamiento de este tipo de crímenes cuando los involucrados son menores. Hasta el punto de que en las redes sociales chinas, los 'hashtags' sobre este asesinato generaron más de mil millones de visitas en un día

La víctima y sus compañeros de clase fueron descritos por los medios como 'niños abandonados', que es un término que se emplea para describir a los niños que en China viven con sus abuelos en zonas rurales, mientras sus padres migran para trabajar en las ciudades.

De los acusados, de los que se conoce solo sus apellidos Zhang y Li, habían acosado durante un largo periodo de tiempo a la víctima, también de 13 años de apellido Wang, según ha relatado el padre del fallecido a la prensa. También hay un tercer chico, de apellido Ma, que según el tribunal no causó daño a la víctima, por lo que fue condenado a recibir educación correccional.

Durante el juicio trascendieron los detalles de lo ocurrido el 3 de marzo. Zhang llevó a Wang al invernadero en una motocicleta, mientras que Li viajó en otra con Ma. En el camino, Li le contó el plan urdido a Ma para matar a Wang. Y cuando los cuatro llegaron a un invernadero de verduras abandonado Zhang atacó a Wang con una pala y Li lo ayudó. Mientras que Ma al presenciar el ataque decidió abandonar momentáneamente el lugar de los hechos. Después, Zhang y Li enterraron a la víctima en el huerto y los tres se alejaron del lugar.

Luego, Zhang usó el móvil de Wang para transferir dinero de su cuenta de WeChat (una aplicación multiservicio china) a Lee y a él mismo. También sacó la tarjeta SIM del teléfono de Wang y le ordenó a Ma que la destruyera. Posteriormente, las autoridades hallarían el cuerpo del joven de 13 años enterrado en un pozo poco profundo del invernadero.

El tribunal argumentó que Zhang era el principal culpable, por planear e instigar a los otros a realizar un crimen que terminó causando la muerte de Wang. Mientras que Li fue considerado un cómplice que participó activamente en el acto.

En 2021, Pekín redujo la edad de responsabilidad penal de 14 a 12 años para «casos especiales» que incluían situaciones particulares como infligir la muerte por «medios extremadamente crueles». El cambio se debió a que en 2018, a un niño de 12 años que, según la policía, mató a su madre, se le permitió regresar a la escuela días después porque no tenían otra opción dado que no podían presentar cargos en su contra.

Además, según la ley china, los mayores de 12 años pero menores de 14 pueden enfrentarse a un proceso penal siempre y cuando lo permita la Fiscalía Suprema Popular, que es el fiscal público de mayor rango del país. En ese sentido, la fiscalía afirmó que debido a que los acusados que por su edad, en ese momento era la de 13 años, debían «asumir responsabilidad penal».

El caso ha recibido una gran atención mediática y despertó la ira del público que desde marzo esperaba un castigo ejemplar. Y desde que se dio a conocer la sentencia los usuarios de redes sociales han elogiado la pena por lo que han llamado un «crimen brutal». Otros consideraron demasiado indulgente la sentencia de 12 años para uno de los acusados. «El que sólo recibió 12 años será un hombre joven cuando sea liberado. Espero que no se vengue de la sociedad cuando salga», se puede leer en un comentario que se hizo viral en Weibo- que es como el Twitter chino. Y algunos prefirieron recordar la agonía de los padres de la víctima. «Como padre, realmente lo siento por el niño», dijo otro usuario de Weibo. «Es realmente desgarrador», añaden.

La importancia del caso, como señalan medios como Al-Jazeera o la CBS, reside en que es uno de los primeros en los que se ha aplicado el límite de edad inferior. Y es que en los últimos años, una serie de asesinatos de alto perfil supuestamente protagonizados por niños ha provocado una reacción más encendida del público.

'The New York Times' informaba de ejemplos como el de Xinyue, una niña de 8 años que fue apuñalada por un niño de 13 años varias veces, y su cuerpo fue abandonado en un bosque de álamos en el noroeste de China. Su familia lleva dos años esperando que se inicie el juicio.

De hecho, algunos abogados han pedido penas incluso más severas que incluyan la pena de muerte. Señalan que en los últimos años los menores a menudo han enfrentado castigos insuficientes por delitos muy graves. Aunque en China, como recuerda NYT, la cifra de arrestos de menores nunca está oficialmente clara.

Otros juristas han apuntado que este tipo de conversaciones en realidad eclipsan los temas de la prevención y la importancia de la educación de los 'niños abandonados' para evitar estos crímenes. No obstante, el debate sigue abierto sobre cómo abordar la delincuencia juvenil en China cuando se habla de casos especialmente atroces.