El Ejército toma el control de la pandemia en Túnez ante el aumento de contagios

Saied ha sostenido en una entrevista concedida a la cadena de televisión emiratí Al Arabiya que el Departamento de Sanidad de las Fuerzas Armadas tunecinas gestionará la crisis en el país y ha criticado duramente las últimas decisiones de Mehdi sobre la campaña de vacunación.

Así, ha sostenido que el llamamiento a una vacunación masiva durante la festividad musulmana del Eid al Adha (Festividad del Sacrificio) sin una organización adecuada es un «crimen» con «fines políticos», tras las imágenes sobre a glomeraciones y estampidas en las colas de espera.

Mahdi decidió poner en marcha dos días de puertas abiertas para que todos los tunecinos mayores de 18 años se vacunaran contra el Covid-19, pero no concibió ninguna medida para supervisar a las personas que se presentaban para recibir el inmunizador o protegerlos del riesgo de contraer el Covid-19 en las aglomeraciones frente a los centros de vacunación.

En este sentido, el primer ministro tunecino, Hichem Mechichi, ha destacado que la decisión de cesar al ministro de Sanidad debió llegar antes, mientras que el propio Mehdi ha afirmado que se enteró de su cese a través de los medios de comunicación, según ha recogido la emisora tunecina Mosaique FM.

El Ministerio de Sanidad tunecino indicó el martes en su último balance que durante las 24 horas previas se habían detectado 6.158 casos y 177 muertos por coronavirus, lo que eleva los totales a 554.911 y 17.821, respectivamente, con 443.979 personas recuperadas hasta la fecha del Covid-19.

La portavoz del Ministerio de Sanidad, Nisaf ben Alaya, alertó a principios de julio de que la situación epidemiológica a causa del coronavirus es «catastrófica» e indicó que el repunte de los contagios está causando una gran presión sobre el sistema sanitario , que se encuentra en tasas máximas de ocupación en varias provincias.

Este mismo lunes, el primer ministro dio orden de poner bajo control de las autoridades las clínicas privadas en varias provincias, incluida la capital, Túnez, para atender a los pacientes con coronavirus ante la falta de oxígeno provocada por el repunte de los casos de los últimos días.

La medida de Mechichi afecta a los centros privados de Ariana, Ben Arus, Kairuán, Medednine, Monastir, Nabeul, Sfax, Susa y Túnez, y contempla que esté en pie hasta que haya un flujo «normal» de oxígeno en los centros sanitarios públicos, según ha informado la agencia estatal tunecina de noticias, TAP.

La oficina de Mechichi ha desmentido, por contra, que en algún hospital del país se haya producido una falta de suministro de oxígeno , al tiempo que ha reclamado que todo el oxígeno disponible sea enviado a los hospitales para garantizar el servicio.

La situación es tan grave que el Gobierno de España anunció el pasado viernes el envío de ayuda humanitaria a Túnez para ayudar al país africano a hacer frente al aumento de los casos y los muertos por coronavirus.