La historia gráfica de Dos Hermanas de los últimos 60 años, en manos de 'El Foti'

Comenzó trabajando en lo que eran las Bodegas Valme, que pertenecían a Rafael Rivas y Guillermo Muñoz, repartiendo vino en un triciclo por los bares.

Aficionado a los toros, como se suele decir, se lio la manta a la cabeza y se fue a Madrid participar en el programa 'Salto a la fama', buscando una oportunidad. «De ahí salieron grandes figuras como Palomo Linares», cuenta. «Yo estuve de maletilla, siete u ocho meses, en Vistalegre, y participé en la película 'Jugando a morir'. Fue una época dura pero que se acabó», añade.

Cuando regresó a Dos Hermanas una lesión pulmonar lo obligó a estar hospitalizado en El Tomillar durante dos años: «yo tendría unos 18 años y me conocían como 'el torero'», explica.

Su afición a la fotografía la compartía con el maestro José Varela, que también le dio clases a él. Este era el encargado del cine nazareno y como dice «me guardaba los negativos o diapositivas de las películas. Yo los cogía y los revelaba. A partir de ahí decidí seguir en la fotografía y me compré la primera cámara. Me costó 1.200 pesetas y se la compré a Fayco, un fotógrafo de aquí».

Sus primeras instantáneas fueron en las puertas de los almacenes de aceitunas, para captar instantáneas de las aceituneras, toneleros,… «Recuerdo que me iba a de una a dos que era la hora que paraban para comer a la Huerta Casanova o Los lobillos», expone. «También me iba al Arenal que era donde terminaba el paseo de solteros y solteras y hacía fotos de grupos o de parejas», afirma.

Y todo eso lo compaginaba con los eventos como bodas, bautizos, comuniones,… De forma ambulante pasó más de una década hasta que se estableció en un local en la calle El Ejido, donde ha pasado 35 años.

«Cuando yo empecé era el más joven de una época de fotógrafos: Margarito (Manuel Rivas), Bernardo Rodríguez, Mauricio Navas, José Torres (Fayco) y yo. Soy el único que queda vivo», rememora. Es autodidacta aunque sí que tuvo hacer exámenes para obtener certificados y títulos que preparó por su cuenta, con libros y material que conseguía.

Como narra, «he trabajado muchísimo porque me llamaban y tenía hasta tres y cuatro bodas a la semana y después iba a todos los eventos que, a partir de la Democracia, organizaba el Ayuntamiento ya fueran de deportes, cultura, inauguraciones,… »

En este sentido, por su cámara han pasado todos los grandes personajes que han pasado por Dos Hermanas, desde SSMM los Reyes de España, D. Juan Carlos y Doña Sofía, hasta presidentes del Gobierno como Carrero Blanco o Felipe González o artistas como Lola Flores, Camarón de la Isla, Rocío Jurado, El Fary, Raphael, Isabel Pantoja, Alaska, Carlos Baute y un larguísimo etcétera-.

Durante muchos años ha trabajado con el clásico sistema de revelado y era una época en la que captabas la fotografía y no la podías ver hasta que no pasaban por el estudio. «He pasado noches y noches enteras revelando y había que saber exactamente qué fotografía hacías porque esa era la que había: luz, posición, fondo,… antes de darle al botón porque no la veías como pasa con la digital», aclara. Así recuerda cómo para la Romería de Valme, por ejemplo, podía emplear hasta 25 carretes de 36 fotografías en un solo día.

«Yo trabajaba de lunes a domingo y no tengo en mi vida laboral ni un día de baja. He sido muy feliz pero también he trabajado mucho», reconoce.

Pese a todas las horas que ha empleado en su profesión asegura que «lo importante de la fotografía es vivirla, es estar allí y luego que quede en el recuerdo, al revelarla y cogerla en papel».

Con satisfacción cuenta que fue «el fotógrafo oficial de la Coronación de la Virgen de Valme y de la visita de los Reyes a Dos Hermanas. Además fui corresponsal, durante un tiempo, de ABC y de El correo de Andalucía».

'El foti' emprendió su labor profesional como fotógrafo con carretes en blanco y negro, luego a color y cuando llegó la revolución digital tuvo que adaptarse a ella. «Ya empezó el negocio a bajar porque nadie imprimía pero aún así me he mantenido en el local hasta que me jubilé hace diez años. Atendiendo estaba Maruja, mi mujer, y yo con las fotos», declara.

Su archivo fotográfico tiene una gran magnitud: «no los he contado pero sé que tengo millones y millones de negativos, ordenados por carpetas, por eventos y por años. Ahora me los están digitalizando para que no se pierdan porque ahí está toda la historia de Dos Hermanas desde hace más de 60 años», manifiesta.

Pese a estar jubilado todavía acude a algún que otro acto con su cámara en mano y flash y, pese a no ser demasiado alto, siempre se ha movido con destreza y soltura en cualquier evento, para estar el primero donde quería.

Las anécdotas y los momentos que revive cuando habla para ABC se multiplican y termina y sentencia con una frase «he hecho millones de fotos y te digo que reconozco cualquiera que haya hecho yo aunque hayan pasado los años».