El relato de la joven que iba a ser secuestrada este viernes en Espartinas: «Iban a por mí»

Uno de ellos -el copiloto- bajó la ventanilla para preguntarle algo y en ese momento la joven se paró y se quitó los auriculares que llevaba puestos para atenderle cuando esta misma persona se bajó bruscamente del vehículo y la agarró por la capucha de la sudadera hasta tirarla al suelo cuando empezó un forcejeo entre ambos.

La víctima se defendió «a puñetazos y patadas» e incluso llegó a darle «un bocado en la muñeca izquierda» logrando finalmente que los secuestradores no lograsen su propósito. Según el testimonio de la joven, ésta aseguró que en el momento del intento de secuestro no había gente cercana por el citado centro comercial .

En su denuncia, la joven describe al que intentó secuestrarla como «una persona « de 1,75 metros de altura, muy delgado, dientes negros , de unos 30 o 40 años de edad y que llevaba una sudadera de color negra con la capucha puesta».

Nada más bajarse del vehículo, este individuo abrió rápidamente la puerta lateral con el propósito de introducirla en su interior. Fue entonces cuando, recuerda la víctima, se dio cuenta de que en el interior había «cajas de cartón» apiladas . A partir de este momento cayó al suelo y empezó a defenderse con el propósito de salir corriendo lo antes posible. En este intervalo «de unos minutos», el móvil de esta vecina de Espartinas se cayó al suelo y el secuestrador perseveró en su idea de introducirla dentro», por lo que descartó que «fueran a robarme, venían a por mí» , según comentó a este periódico.

El conductor de la furgoneta, que «no se bajó en ningún momento, era mayor, de unos 50 años de edad , con piel oscura y barba muy cerrada, con una camisa tipo leñador de cuadros». Asimismo, esta joven de 18 años comentó en su denuncia que «ignora el acento de los individuos o país de origen y que no sabe con qué fin intentaban introducirla en la furgoneta».

Nada más ocurrir este suceso, la víctima, muy nerviosa, avisó a su madre y junto a su hermana , fueron hasta un hospital cercano para que le hicieran una pequeña exploración, puesto que durante el forcejeo sufrió varios golpes. En concreto, presentaba una «erosión y eritema en el hemitórax izquierdo», fruto del forcejeo.

Según comentó la propia víctima a este medio, ella suele pasear normalmente por esta zona concurrida de Espartinas y «nunca he tenido algún tipo de problemas hasta ayer».

Al tener constancia de este suceso, la madre de la joven puso en alerta enseguida a sus conocidos a través de los grupos de Whatsapp, indicando lo que acababa de suceder a su hija. Por su parte, la Policía Local de Espartinas confirmó a ABC lo sucedido en estos mismos términos.