excomisario de la ue
Olli Rehn:«Hay que mezclar inversiones nacionales y europeas para garantizar una defensa común»
«No veo otra alternativa para Europa que invertir en descarbonización y transición verde»
El gobernador del Banco de Finlandia descarta una vuelta a los tipos de interés cero en un futuro

El excomisario Olli Rehn defiende fervientemente que Europa apueste por proyectos comunes de seguridad y defensa y aboga por mezclar tanto inversiones nacionales como comunitarias. Sugiere que la estrategia se coordine entre los militares y las industrias para que los esfuerzos sean eficaces.
El actual ... gobernador del Banco de Finlandia cree que el Viejo Continente no tiene otra alternativa que «invertir en descarbonización y transición verde» y considera que las estrictas normas de la política exterior común de los 27 «limitan la acción rápida y eficaz» de la Unión Europea.
España es un país que conoce bien porque uno de sus mejores amigos trabaja como periodista en Málaga. «Las reformas estructurales, especialmente en el mercado laboral, le han ayudado a crecer con bastante fuerza», subraya en una entrevista en el Centro Común de Investigación (JRC) de Sevilla.
Rehn formó parte durante una década de la Comisión Europea (CE), fue un férreo defensor de las políticas de austeridad y gestionó los rescates financieros de Grecia, Portugal e Irlanda. «Los países deben mantener la sostenibilidad de sus finanzas públicas, aunque haya grandes necesidades de inversión, tanto en la transición ecológica como en digitalización y la defensa», añade.
En cuanto al coste de la financiación, no considera que en un futuro próximo se pueda volver a los tipos 0 y defiende mantener intacta la caja de herramientas para poder utilizarla en caso de necesidad.
—¿Qué obstáculos políticos considera que existen para una mayor integración en defensa?
—En política exterior común tenemos unas normas de unanimidad muy estrictas. Y este es uno de los errores del pasado que está limitando la acción eficaz y rápida de la Unión Europea. La segunda no ha sido un problema hasta ahora, pero se ha convertido en un problema. Tradicionalmente nos hemos apoyado en la OTAN y en Estados Unidos para nuestra defensa común. Sería importante que Estados Unidos mantuviera su compromiso con la seguridad europea también en el futuro. Es de interés tanto de Europa como de Estados Unidos. Eso no está en nuestras manos y tenemos que adaptar y ajustar nuestras políticas en consecuencia. Por eso vengo reclamando una mayor inversión en defensa común europea.
«Las normas de unanimidad son muy estrictas. Es importante que EE.UU. mantenga su compromiso con la seguridad de Europa»
—¿Cree que la defensa europea es realmente viable sin depender de Estados Unidos?
—Estados Unidos ha proporcionado un respaldo de seguridad para Europa y para la defensa territorial de Europa junto con sus aliados europeos. Ahora, varias declaraciones recientes de la parte estadounidense cuestionan este compromiso.
Por otro lado, he sabido por nuestros militares, que las estructuras de planificación militar de la OTAN están intactas y que todos los Estados miembros participan plenamente en estas estructuras estratégicas, incluido Estados Unidos. Está claro que los países europeos tendrán que aumentar su gasto en defensa y su responsabilidad conjunta en materia de seguridad exterior europea. Y aunque los europeos tenemos que actuar con rapidez, al mismo tiempo es importante que el puente entre Europa y Estados Unidos se mantenga lo más sólido posible, especialmente durante esta fase de transición.

—¿Considera que la flexibilidad fiscal aplicada durante la pandemia debería mantenerse en el futuro para permitir una mayor inversión en defensa?
—Las nuevas normas fiscales de la UE incluyen la cláusula de excepción, que facilita un mayor nivel de inversión y, por tanto, un déficit fiscal a corto y medio plazo, siempre que se garantice la sostenibilidad de la deuda a largo plazo. En mi opinión, en el contexto actual de grandes tensiones geopolíticas, está justificado que los Estados miembros puedan hacer uso de esta cláusula de flexibilidad en las normas fiscales de la UE. De hecho, necesitamos una mezcla entre inversiones nacionales y europeas en la defensa común para garantizar la seguridad exterior de Europa. Es importante que la Unión Europea invierta en proyectos europeos comunes en el ámbito de la seguridad y la defensa.
«En el contexto actual de grandes tensiones, está justificada la flexibilidad en las normas fiscales de la UE»
—¿Qué tipo de proyectos se podrían impulsar?
—Creo que es importante que los especialistas de ese campo, es decir, los militares, y las industrias de defensa coordinen sus esfuerzos para que podamos hacer un uso eficaz del aumento de la financiación. Quiero subrayar que debe haber proyectos europeos comunes que apoyen el bien público europeo, que es la seguridad exterior. ¡La seguridad exterior es importante para todos nosotros en Europa!
Corresponde a los gestores de las fuerzas armadas en Europa definir conjuntamente qué tipo de equipos, qué tipo de tecnologías, qué tipo de armas y municiones se necesitan. Y debe hacerse de forma coordinada para que el gasto adicional no sólo aumente los precios, sino que incremente los volúmenes de forma eficaz. Estoy pensando, por ejemplo, en áreas como la defensa aérea y la producción de drones. Estas son ciertas lecciones que nos deja la guerra de Ucrania.

—La política europea está muy polarizada, incluso en lo que respecta a la visión de la propia Europa. ¿Estamos en un punto de inflexión en el que tenemos tanto la oportunidad de unirnos más como el riesgo de dar un paso atrás?
—Creo que estamos en un punto de inflexión, en el sentido de que no podemos seguir como antes. También existe el riesgo de una reacción violenta y de retroceder... En mi opinión, ahora tenemos dos grandes retos. Tenemos, en primer lugar, la defensa común de Europa y, en segundo lugar, la mejora de la economía mediante un mayor crecimiento de la productividad y la mejora de nuestra competitividad industrial en Europa.
EE.UU. está desviándose de los objetivos del cambio climático y representa el 11% de las emisiones globales
Debo añadir el cambio climático y la transición verde, que es una realidad. Es un problema global que requiere soluciones globales. Ahora Estados Unidos está desviándose de ese camino. Representa el 11% de las emisiones globales. Tenemos que trabajar con nuestros socios mundiales en la lucha contra el cambio climático y nos interesa invertir en la transición ecológica. Sobre todo porque, a diferencia de Estados Unidos, que es un exportador neto de energía fósil, nosotros somos un importador neto de energía y eso es muy costoso hoy en día. Esa es una de las razones por las que nuestra competitividad industrial es más débil. Así que, para nosotros, no veo otra alternativa significativa que invertir en descarbonización y transición verde.
—España está creciendo a un mayor ritmo que muchos otros estados de la Unión Europea. ¿Considera que parte de este éxito se deba a las políticas de austeridad implementadas después de la crisis de 2008?
—En primer lugar, me alegro mucho de que a España le vaya muy bien en términos económicos y también en otros aspectos. Creo que es justo decir que las reformas estructurales, especialmente en el mercado laboral, han ayudado a España a crecer con bastante fuerza en los últimos años. Por supuesto, también se ha visto respaldada después de 2012 por la política monetaria más acomodaticia del BCE. La combinación de las reformas estructurales a nivel nacional y la política monetaria del BCE han sido fundamentales para apoyar el crecimiento sostenido y el aumento del empleo en España.
En cuanto a la austeridad, es una palabra bastante cargada. No suelo utilizarla. Creo que es mejor hablar de consolidación fiscal. España tomó decisiones difíciles hace más de diez años, que han allanado el camino para la sostenibilidad de las finanzas públicas en el país. Es importante que todos los Estados miembros de la UE, incluida España, mantengan la sostenibilidad de sus finanzas públicas, aunque hoy en día haya grandes necesidades de inversión, tanto en la transición ecológica como en la digitalización y la defensa común.
«Todos los países incluido España deben mantener la sostenibilidad de sus finanzas públicas»
—¿Cómo van a evolucionar los tipos de interés?
—Si tiene una hipoteca, no puedo prometerle nada. Ahora en serio, sí que dimos más orientación sobre los tipos durante la época de baja inflación o durante la época en la que teníamos peligro de deflación, desde 2011 hasta 2021, básicamente. Pero más recientemente, no hemos hecho tanto 'forward guidance' porque estamos en un entorno en el que hay una elevada incertidumbre. El 'forward guidance' funciona en el entorno de baja inflación. Así que lo que hacemos hoy en día es confiar en la dependencia de los datos y tomamos decisiones en cada reunión basándonos en cifras recientes y en nuestro análisis exhaustivo. Ahora, la desinflación va por buen camino. Las perspectivas de crecimiento están algo debilitadas. Esto ha justificado los recortes de tipos desde el pasado mes de junio. Hemos realizado seis recortes de tipos desde el pasado mes de junio, del 4% al 2,5% en el tipo de interés oficial del BCE. En cuanto al futuro, tenemos nuestra próxima reunión el 17 de abril.
Y como he dicho, mantendremos plena libertad de acción en esa reunión. En caso de que se confirme nuestra línea de base sobre el crecimiento y la inflación, y con el fin de alcanzar nuestro objetivo de inflación del 2%, si los datos dicen que debemos recortar los tipos en esta reunión de abril, entonces, en mi opinión, deberíamos hacerlo. Si los datos dicen otra cosa, entonces deberíamos hacer una pausa.
—¿Cree posible un escenario futuro en el que los tipos vuelvan a interés 0?
—Tenemos que ser conscientes de que el llamado tipo natural de interés o tipo de interés de equilibrio puede ser bajo también en el futuro, como lo fue en la década anterior. En otras palabras, tenemos que ser conscientes de mantener intacta nuestra caja de herramientas para poder utilizarla para contener una inflación excesivamente baja o excesivamente alta. Pero por el momento, no veo una vuelta a los tipos de interés cero.
—¿Considera que el programa Next Generation ha sido un instrumento útil? Andalucía ha sido el territorio que ha recibido más fondos, ¿han sido bien empleados?
—Creo que es un tema en el que el jurado aún no se ha pronunciado. Se han utilizado para reformas en los Estados miembros y para apoyar la construcción de infraestructuras. Estoy deseando saber hasta qué punto es eficaz, pero sin duda ha tenido un efecto positivo. Si hablamos de los Fondos Estructurales y de Cohesión… He estado en España con frecuencia porque uno de mis mejores amigos es periodista en Málaga. Recuerdo cuando conducía con él desde Madrid en 1989 hasta Málaga tardamos unas 12 horas. En 1992, fuimos a una boda y tardamos seis horas y media. La infraestructura se construyó en los años ochenta ahora da sus frutos en términos de fortaleza de la industria manufacturera española. Todos los hoteles, carreteras y demás infraestructuras se utilizan más estos días. Y esa es una de las razones o un factor que está ayudando al desarrollo económico de España en estos días. Yo diría que esta inversión en infraestructuras, combinada con las reformas estructurales, especialmente en el mercado laboral, han sido muy útiles para apoyar el desarrollo económico del país.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete