El testamento de Julio Manuel de la Rosa

Este libro viene precedido por una introducción de Francisco Núñez Roldán , que cultivó una larga amistad con Julio Manuel de la Rosa y que conoció como pocos al autor de «Guantes de seda» . De hecho, ambos se intercambiaban sus textos antes de publicarlos. En una entrevista con ABC, el escritor madrileño dice que «Julio me comentaba que algunas de estas novelas las había mandado a varias editoriales, pero al final no le echaron cuenta».

«Cita en Weimar», que está fechada en el año 2005, era la única que no conocía Núñez Roldán. Según este, «Julio la concibió a raíz de un viaje que yo realicé por la tierra de Johann Sebastian Bach, un lugar donde contrasta el bien y el mal. Es curioso que cerca de Weimar, la misma ciudad que acogió a Göethe y Schiller , estuviera ubicado el campo de concentración de Buchenwald . En una tertulia en la que posteriormente comentamos las impresiones de mi viaje hablamos de que esa ciudad representa la idea del bien y el mal . Julio escribió su novela después de esta conversación y ahora la he podido conocer gracias a que su hija me pasó este material».

Respecto a «La guerra secreta del general Franco», que data de 2007, como bien indica en su introducción Núñez Roldán, « está entre la que podríamos llamar narrativa militante de Julio de la Rosa , aspecto que ocupa un buen espacio dentro de su obra, y de la que también formaría no poca parte de la ya referida Cita en Weimar».

«La guerra secreta» retrata con gran maestría el conflicto armado de Ifni, en 1958. «Es una novela crítica contra el franquismo , como siempre fue él», comenta el autor madrileño, quien asegura que en sus páginas aparece Etruria, el mismo lugar imaginario donde De la Rosa ubicó la Guerra Civil y la posguerra. « Etruria es un trasunto de Sanlúcar la Mayor pasado por el matiz del escritor . Sanlúcar fue muy importante en su infancia. Es curioso que su vida estuviera entre Sanlúcar la Mayor y Sanlúcar de Barrameda, donde acababa sus novelas», dice Núñez Roldán.

«Julio era antifranquista, pero en una línea liberal, como Chaves Nogales . Su padre, que era funcionario del Ayuntamiento, fue represaliado». «La guerra secreta del general Franco» es una novela que destaca porque «retrata con una gran plástica el desierto. Él nunca estuvo allí, pero fue capaz de describir la grandeza del desierto y la soledad del paisaje », admite el autor madrileño.

La tercera novela que integra este volumen es «El hijo tonto», que es la más reciente de las tres, pues está fechada en el año 2011. «Julio era un gran flaubertiano —confirma Núñez Roldán—. Conocía muy bien la obra de Flaubert y las cartas que le escribió a su amante, Louise Colet . En esta novela escribe una autobiografía apócrifa de una sobrina de este autor, una excusa para hacer un recorrido por la literatura francesa del siglo XIX y la poética de la literatura de Flaubert, en el sentido de su estética literaria».

Preguntado sobre el estilo de De la Rosa, el escritor madrileño dice que este autor «tenía mucha carga lírica en su narrativa. El concepto lírico de Cernuda influye en el aspecto lírico de la narrativa de Julio».

En estas novelas que ahora acaba de recuperar Algaida también el escritor sevillano menciona a Faulkner , que junto a Hemingway eran «los dos autores americanos que más admiraba. Los había leído mucho a ambos. También le gustaba Juan Benet por su acercamiento a Faulkner, e Ignacio Aldecoa , que era más parecido a Hemingway por su sencillez y estilo directo», dice Núñez Roldán.

Preguntado por si quedan más textos inéditos de Julio Manuel de la Rosa, el escritor madrileño afirma que existe una novela incompleta que está escrita a varias voces como Faulkner. También hay una novela sobre Pablo de Tarso , pero él no quería que se publicara. «Es una hipotética autobiografía de San Pablo, pero al final los hijos han decidido no publicarla siguiendo la voluntad de su padre». «Esa novela —puntualiza Núñez Roldán— junto a “El laberinto del príncipe”, sobre Miguel de Cervantes, las mandó a Plaza y Janés a través de Caballero Bonald, pero esta editorial no las publicó al final».

Por otra parte, se lamenta Núñez Roldán de que Julio Manuel de la Rosa «no ha sido un escritor suficientemente reconocido en Sevilla» . «Se han hecho homenajes a autores menores que él en la Feria del Libro de Sevilla. Recuerdo que cuando se celebró el centenario de Cernuda hicieron una publicación en Cajasol y no llamaron a Julio, que era un gran experto en el poeta sevillano. Tampoco la Hispalense lo ha reconocido, por lo que nunca ha sido un profeta en su tierra. Quizás el carácter pacato de esta ciudad haya hecho que no se le reconozca , lo mismo que le ocurrió a Cernuda. Tal vez dentro de medio siglo sí se haga esto. A lo mejor si hubiera vivido en Madrid o en Nueva York se le hubiera considerado más».

En cuanto a su obra favorita de Julio Manuel de la Rosa, Núñez Roldán destaca «Los círculos de noviembre» . «Creo que es su novela más redonda, ya que tiene una gran carga humana y destaca por su altura lírica . En ella se narran los últimos días de Fernando Pessoa y la relación que tuvo con su barbero. Él era un enamorado de Lisboa y con esta novela ganó el premio Ciudad de Salamanca».

Por último, Núñez Roldán afirma que « espero que se haga justicia con un autor que destacaba por su gran honradez literaria , pues realmente no escribía para ganar premios ni tenía ningún tipo de pretensiones extraliterarias. Fue la persona más clavada al mundo de las letras que he conocido, el más comprometido con su literatura, sin importarle nada el éxito ni el fracaso, como decía Kipling. Era muy consecuente con la literatura».