«Cine Pensado 2016», un estudio con rigor técnico y hondura antropológica

¿Cómo surgió la idea de sacar un segundo libro del «Cine Pensado» tras el éxito del primero que apareció hace justo hace un año?

En buena medida del contacto que hemos tenido con los lectores . Dicen que no basta con hacer una buena película, hay que cogerla de la manita y sacarla a pasear. Eso hicimos con el libro en muchas presentaciones que fueron coloquios apasionados de autores y lectores, todos admiradores del buen cine, sobre las películas del libro con apoyo en secuencias. El evento en Sevilla fue en la Fundación Caja Rural del Sur y lo pasamos en grande. Paseamos el libro por diez ciudades, incluyendo el Instituto Cervantes de Roma .

En esta época de tantos datos, sobre todo a través de las redes sociales, ¿qué cree que aportan estos artículos sobre algunas de las películas más destacadas de 2016?

Libros como «Cine Pensado» hacen algo que me parece muy necesario. Segundas navegaciones o, dicho de otro modo, repensar la ficción. Volver sobre una gran película como «Frantz» es un ejercicio intelectual bellísimo. Estamos sepultados por los datos, por la información sobre todo, también en el cine. Si dejas de pensar, el cine, la música, la pintura, la literatura llegan menos o no llegan: recibimos a la manera del recipiente. Las películas excelentes requieren que el espectador vaya al cine a trabajar . Cosa perfectamente compatible con disfrutar y descansar.

La nómina de colaboradores en esta publicación es muy extensa y refleja una mirada desde múltiples puntos de vista sobre las películas analizadas, ¿no es así?

Los autores somos críticos de cine profesionales y/o profesores de universidad que enseñamos, directa o indirectamente, lenguaje cinematográfico y narrativa audiovisual. Damos clase en doce universidades. Escribimos y hablamos de cine en diarios, revistas, radios, televisiones y portales de internet en España, Alemania e Italia. Muchos son los libros sobre cine que hemos publicado. Compartimos la destreza para para ver, admirar, identificar y comparar. Y a la vez, somos humanistas. Queremos abordar el cine como se merece: con rigor técnico en el estudio de la forma (la narrativa y la estética) y con hondura antropológica en la recepción del relato y su contexto (el fondo).

En el libro se hacen estudios críticos de 31 películas de muchos y variados realizadores como Woody Allen, Alberto Rodríguez, Paolo Sorrentino, Nanni Moretti, Jim Jarmusch, Danny Boyle, Juan Antonio Bayona y un largo etcétera. ¿Qué criterios han seguido a la hora de analizar los filmes de estos directores? ¿Qué pueden tener en común películas tan aparentemente distintas como «Rogue One» o «The Vessel»?, por poner solo un ejemplo?

En la selección inicial presenté a los autores entre 40 y 50 películas estrenadas ese año en las salas españolas. Cada autor escribe lo que más le gusta e interesa, la película que quiere pensar. Se hace muy buen cine en lo que llevamos de siglo, en parte porque se ha democratizado la producción con la tecnología digital . La globalización tiene inconvenientes pero también grandes ventajas, una de ellas es que realmente estamos en la era del acceso. Es posible ver cualquier película legalmente, con subtítulos en español, por muy poco dinero. Solo basta esperar unos meses y comprarla o alquilarla o verla una plataforma VOD . Ese avance es maravilloso para el buen aficionado al cine.

Esta publicación puede ser de referencia no sólo para estudiantes y profesionales del sector audiovisual, sino también para un público más amplio, ¿no?

Claro. Que muchos de los autores seamos profesores de universidad y a la vez críticos de cine profesionales ayuda que lo que escribamos sea capaz de seducir al que ha visto la película. Y también al que no, porque se trata de proponer una lectura de la película. Dicen que no hay libros, hay lectores. Es muy matizable eso, pero vale para las películas. Lo que defendemos sin fisuras es aquello de Joubert: «Antes de emplear una palabra hermosa, hazle un sitio».

Hábleme brevemente sobre la trayectoria de la revista «Fila Siete» desde su aparición hasta nuestros días.

Cumplimos 20 años de vida. Son muchos para una revista de crítica de cine y artes visuales. Y seguimos saliendo en papel cada trimestre , en un papel muy hermoso: la revista es una belleza, y no me ciega la pasión. Estoy muy orgulloso de un equipo amplio que no sería nada sin nuestro editor Juan Pedro Delgado . Nuestro portal ofrece muchos contenidos en la línea de la revista. No nos gusta llorar, pero para sostener una revista y un portal hace falta que muchos amantes del arte audiovisual nos compren. Estamos agradecidos a nuestros colaboradores y anunciantes, pero, a día de hoy, financiar solo con publicidad una revista o un portal culturales de buen nivel intelectual es muy difícil en España. Nos vendrían bien más suscriptores, la verdad.

¿Qué proyectos importantes tienen pensado para estos próximos meses? ¿Habrá también un tercer volumen de «Cine Pensado»?

Por supuesto, cuando contesto a sus preguntas, ya tengo cerradas las elecciones de los autores de «Cine Pensado 2017» . Hay películas fascinantes: «La La Land», «Manchester frente al mar», «Verano 1993», «El tercer asesinato…» Y queremos publicar un libro sobre Estilismo y Cine que será fascinante, en línea con una de las secciones más seguidas de la revista. Y por mi parte, tengo terminados dos libros sobre Terrence Malick . Uno se dedica exclusivamente a «El árbol de la vida», la ganadora del Festival de Cannes en 2011. Otro estudia toda la obra del director norteamericano, uno de los grandes vivos y rodantes.