Triana cumple medio siglo

Hace justo medio siglo fue el lanzamiento de dos discos sevillanos. El primero llevaba por título precisamente la fecha de aquel día, de claras resonancias republicanas, a cargo del grupo Goma, el de Manolo Rodríguez y Pive de manager. Porque en Sevilla hubo un Goma antes que el bar del cementerio, que acaba de pronunciar del revés el adagio que hacía imprimir en sus sobrecitos de azúcar: «Aquí se está mejor que allí». Pues ya está, peor, allí.

El otro disco de aquella jornada liminar no llevaba título. O el título era el del propio grupo que lo interpretaba: Triana, con la voz de Jesús de la Rosa, a los teclados, Eduardo Rodríguez Rodway a la guitarra y Tele (el apodo nada ingenioso de Juan José Palacios, dado el pasado familiar en Telégrafos) a la batería. Andando el tiempo, el disco se conoció por 'El patio', porque Máximo Moreno pintó justo eso para la carpeta del álbum aprovechando las fotos de un corral de vecinos que había tomado en la plaza Cristo de Burgos, con Dolorcita cocinando con carbón, y el recuerdo de su propio padre, recién fallecido, asomado a una ventana.

Al grupo lo llamaron Triana porque sonaba bien, no porque sus integrantes tuvieran conexión con el barrio. Jesús de la Rosa era como Belmonte, el Pasmo de Triana, trianero de la calle Feria. En realidad, el grupo Triana nació en Madrid. El productor Gonzalo García Pelayo parteó el nacimiento de su primer elepé hace ahora medio siglo: 'Abre la puerta' era algo más que una canción, era un grito, un sueño en aquella España con Franco vivo.

Pero el recién nacido no llegó con un pan debajo del brazo, porque el primer trimestre de ventas del disco se saldó con 29 discos despachados. Antes de llamarse rock andaluz, pasó por rock progresivo o rock sinfónico. Hasta se acuñó el marbete de rock sevillano.

En el primer apunte sobre el grupo en la hemeroteca del periódico, Francisco Navarro firmaba un suelto el 8 de junio de 1979 para presentar su tercer elepé, 'Sombra y luz' con José de la Tomasa como invitado especial: «Esta noche, desde las diez, por 300 pesetas, concierto de Triana en el campo de fútbol de los Salesianos de Triana. Rock sureño, andaluz, en nuestra ciudad». Y seguía diciendo: «Esta noche Triana tratará de convencer, deberá equilibrar el tremendo desnivel existente entre unos discos de montaje perfectos, con calidad, y unas actuaciones en público que a veces dejan que desear».

Y tanto que lo equilibró. Triana llegó a lo más alto.