Una ambulancia del patrimonio para operar en toda la provincia de Sevilla

Estos bienes artísticos y patrimoniales se han restaurado en las instalaciones de este organismo adscrito a la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico que, sin embargo, encontraba dificultades y limitaciones para poder operar sobre determinadas piezas 'in situ' con el objetivo atajar patologías y garantizar la conservación.

Este es el caso de aquellas obras que no podían ser trasladadas a la sede de este organismo en la Isla de la Cartuja, bien por sus dimensiones, como por ejemplo un retablo o una escultura de gran tamaño, o por un estado de conservación que imposibilite la toma de muestras sin hacer peligrar su integridad física.

Con el objetivo de llegar a estos bienes, desde pinturas rupestres a un castillo, o para la evaluación de piezas en yacimientos arqueológicos , el IAPH ha puesto en marcha un laboratorio móvil que permitirá evaluar y actuar sobre este patrimonio en su ubicación original, lo que posibilita ampliar la cobertura a toda la provincia de Sevilla y, por extensión, a cualquier rincón de Andalucía para intervenir sobre cualquier Bien de Interés Cultural (BIC) .

Tal como explica la jefa del laboratorio de Química e investigadora principal del proyecto, Lourdes Martín García , la idea de poner en marcha esta suerte de ambulancia del patrimonio histórico , es «poder estudiar in situ aquellos bienes que no se pueden trasladar a nuestras instalaciones, lo que nos permite abarcar toda la comunidad».

Esta técnico del IAPH confía en que este laboratorio móvil esté plenamente operativo el próximo marzo , lo que supondrá la culminación de un proyecto iniciado en 2019, con el objetivo no solo de ampliar su cobertura territorial, sino de mejorar la técnicas de intervención para hacerlas menos invasivas , lo que redunda en una mejor conservación de las piezas.

Porque el proyecto no solo incluye la creación de esta 'ambulancia' del patrimonio, dotada con la última tecnología , sino que ha llevado aparejada la modernización del equipamiento científico-tecnológico del organismo. A ello contribuye otra de las motivaciones fundamentales de esta iniciativa, que es poder aplicar a los bienes « técnicas no invasivas o no destructivas , es decir, que permitan realizar mediciones precisas sin tener que tomar muestras, esto es, sin tocar la pieza o con un efecto mínimo sobre ella».

Un ejemplo de ello es el espectómetro FTIR de infrarrojos, que mediante una sonda parecida a un bolígrafo, aplicada, por ejemplo, sobre la superficie de un cuadro, permite analizar su estado de conservación y apreciar algunas de sus patologías, sin la necesidad de tener que extraer ninguna muestra de pintura.

Este elemento forma parte de la dotación del laboratorio móvil que se transporta en una furgoneta del IAPH . Esta cuenta también con microscopio, sistemas de rayos X , un sistema de radiografía digital portátil, equipos para medir la resistencia a la perforación —útil para saber cómo se encuentran los materiales de un edificio— y equipamiento para análisis químicos, geológicos, paleobiológicos y biológicos, según explican dos de las técnicos asociadas a este proyecto, la directora de Investigación y Transferencia, Marta Sameño Puerto , y la jefa del Laboratorio de Química, Cristina García Garrido .

La combinación de movilidad e intervención no invasiva convierte a este organismo de la Consejería de Cultura en «pionero» , pues «en España no hay ningún otro proyecto con esta visión global , que sí se pueden encontrar en otros países, y que nos permitirán intervenir 'in situ' desde en un documento escrito a un edificio», indica Lourdes Martín García.

A este laboratorio móvil estará adscrito un equipo formado por nueve personas, que incluye un técnico responsable de cada departamento de este instituto de patrimonio, algunos de ellos con más de veinte años de experiencia, a los que se suman especialistas en el manejo de equipos como el de rayos X. Esto permitirá que se pueda ofrecer una intervención integral sobre piezas como, por ejemplo, un retablo, lo que incluye desde pintura a estado de la madera.

El laboratorio móvil actuará según sea demandado por instituciones públicas y entidades privadas, pudiendo dar servicio a museos, centros de investigación, yacimientos arqueológicos, conjuntos de arte rupestre y cualquier BIC que se encuentre en territorio andaluz . «Podría llegar a tener entre dos o tres intervenciones a la semana si fuera necesario», indica la investigadora principal.

Cuando entre en servicio a principios de este año esta ambulancia del patrimonio del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico habrá logrado culminar un proyecto que arrancó en 2019, fecha en la se presentó a una convocatoria abierta de concurrencia competitiva para la mejora de su equipamiento científico .

En concreto, propuso su proyecto de laboratorio móvil a las ayudas del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica de Innovación 2017-2020 del Ministerio de Ciencia e Innovación , que están cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional ( Feder ) de la Unión Europea . Así, este organismo logró en 2019 una dotación económica de casi un millón de euros que permitieran poner en marcha este laboratorio móvil y modernizar algunas de las tecnologías de las que disponía el instituto.

La mayor parte, unos 600.000, se han destinado al equipamiento de esta ambulancia patrimonial, pero también para la adquisición de un nuevo y sofisticado microscopio electrónico de barrido para las instalaciones del IAPH, fundamental para la caracterización de los materiales y establecer el grado de conservación de los bienes culturales.

Esta tecnología se inscribe en la profundización de técnicas no destructivas para la restauración del patrimonio , ya que cuenta con un compartimento que permite introducir piezas de pequeño tamaño en su interior para su análisis.

Todo este material y tecnología se ha probado según ha ido llegando desde hace dos años al instituto por parte de los técnicos para testar sus usos y familiarizarse con ellos, en un proceso que ha ralentizado las complicaciones y los confinamientos derivados de la pandemia del coronavirus.

Esta fase de puesta a punto está próxima a concluir y permitirá, una vez operativa esta ambulancia sobre marzo de este año, que la restauración del patrimonio pueda llegar hasta el último rincón de la provincia .