El Puerto de Sevilla invierte 1,2 millones en el mantenimiento de las compuertas de la esclusa

La revisión y adaptación de los carros inferiores forma parte de las tareas de mantenimiento que el Puerto ejecuta «periódicamente» para «garantizar el correcto funcionamiento de la esclusa». En total, en las tres actuaciones anteriores, realizadas en 2018 y 2021, más la adjudicada ahora, la Autoridad Portuaria de Sevilla ha invertido 1,2 millones de euros.

El carro inferior de la compuerta del lado puerto es una estructura que alcanza unas dimensiones de casi cinco metros de ancho y cuatro de largo y pesa alrededor de 22 toneladas. Ésta es una pieza fundamental de la esclusa. Cada una de las cuatro puertas correderas de la esclusa (dos en lado puerto y dos en lado río) se apoyan sobre un carro inferior, el cual permite la apertura y cierre de las mismas.

La particularidad de estos trabajos reside en el «complejo manejo» de la compuerta de la esclusa, que alcanza un peso en torno a 1.000 toneladas y unas dimensiones de 42 metros de largo, 20,5 metros de altura y cinco de ancho. La compuerta será desplazada de su ubicación (se lleva a posición de mantenimiento) y elevada mediante tanques de flotación para poder realizar las tareas de extracción y sustitución del carro inferior mediante grúas.

El mantenimiento de la esclusa es de «gran importancia», resaltan fuentes del Puerto, no solo por las instalaciones portuarias sino para la propia ciudad ya que «una de las funciones es proteger a Sevilla de inundaciones y mantener el nivel del agua de la dársena». Las compuertas situadas en el lado del río están «coronadas» a la cota +9, «la máxima avenida para un periodo de retorno de 500 años». En el caso de grandes avenidas estas puertas exteriores de la esclusa se cierran quedando así protegida la ciudad.

Además, la esclusa también funciona como «ascensor de barcos». La entrada de buques al Puerto de Sevilla está marcada por las mareas. Al navegar por la canal de navegación, los buques utilizan las mareas con el fin de aprovechar el nivel de agua suplementario y, de esta forma, incrementar el calado operativo.

El río Guadalquivir a la altura de Sevilla cuenta con una carrera de marea media de dos metros, lo que hace necesaria una infraestructura que permita elevar o bajar el nivel para entrar o salir del Puerto, cuya lámina de agua está a cota fija (alrededor de la cota +1,5 metros). El funcionamiento de la esclusa es «sencillo y análogo al de un ascensor» el barco se sitúa entre las compuertas, se modifica el nivel del agua mediante gravedad, el barco sube o baja y, finalmente, con la apertura de la compuerta el barco sale con el nuevo nivel.