La mafia georgiana: una estructura piramidal y dos jefes

Estas mafias también presentan una estructura piramidal con varios escalones operativos. En su cúspide se encuentran los Vor v Kazone, esto es, «ladrones de ley». Para diferenciarse del resto y reforzar su posición dentro de la organización se tatúan estrellas y otros símbolos, como los dos de los detenidos en la operación del 23 de agosto, gracias a lo cual se les pudo identificar como jefes de la mafia. Aunque la inspectora Clerc, responsable de robos, no quiso dar demasiados detalles para no poner en riesgor futuras actuaciones, sí explicó que uno de los tatuajes más frecuentes es el de estrellas en la zona de la clavícula: cuanto más elevado sea el puesto en la pirámide, más estrellas se tatúa sobre la piel.

Estas bandas cuentan con una importante infraestructura que les proporciona todo lo necesario para la comisión de sus delitos: documentación falsa, nuevas identidades, vehículos preparados con huecos y escondites para ocultar lo robado, herramientas, alojamiento o dinero para sufragar todo tipo de gastos. La inspectora Clerc no aclaró ayer si estos ladrones llegan a alquilar alguna vivienda en el tiempo que permanecen en la ciudad para sondear qué viviendas están vacías y perpetrar los robos.

Los agentes de la Policía Nacional detuvieron a principios de verano a doce ciudadanos georgianos que formaban parte de tres organizaciones criminales dedicadas a los robos en domicilio y que se encontraban asentadas temporalmente en diferentes alojamientos hoteleros repartidos por toda la ciudad de Sevilla, con motivo de la época estival.

Desde el año 2013 se comenzó a observar la presencia esporádica en nuestra capital de organizaciones integradas por ciudadanos procedentes de países del Este dedicados a la comisión de robos en domicilios, actividad que aumentaba exponencialmente en los períodos vacacionales, convirtiéndose Sevilla en objetivo de estas mafias, al igual que otras ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia, que hasta ese momento eran los lugares donde su presencia había resultado demasiado relevante.