Una uróloga desmiente que hagan falta dos litros de agua al día y avisa: «Si bebes demasiado...»

Ingerir las cantidades mínimas de agua a diario es una gran preocupación para muchas personas. Y es que, aunque no existe una verdad absoluta en torno a la cantidad de agua que todos debemos beber diariamente, sí hay recomendaciones sobre la cantidad total que debemos tomar para mantenernos hidratados.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la recomendación de consumo es de entre 2 y 2,5 litros al día para las mujeres adultas y entre los 2,5-3 litros para los hombres adultos bajo condiciones normales de actividad y temperatura. Por su parte, el Instituto de Investigación Agua y Salud mantiene que, para garantizar el mantenimiento de un equilibrio hídrico adecuado en el organismo, hay que ingerir entre 6 y 8 vasos de agua a lo largo del día.

Sin embargo, hay muchos expertos que rehuyen de esta afirmación. Una de ellas es la uróloga Rena Malik que ha destacado que, aunque es importante beber agua de forma regular para evitar cualquier tipo de irritación en la vejiga, existen una serie de peligros sobre estos mitos en torno a la hidratación y el agua.

«Beber muy poca agua hace que la orina esté muy concentrada», explica Malik, lo que a la larga puede hacer que «esa orina concentrada pueda actuar como irritante de la vejiga». «Usted puede sentir que necesita orinar con más frecuencia o con más urgencia», ha advertido esta doctora.

A la hora de hablar sobre la cantidad de agua que se debe beber al día, la uróloga ha insistido en que no es obligatorio tomar esos ocho vasos de agua. «Es necesario consumir algún tipo de líquido en ese volumen por día. El 20 por ciento de nuestros líquidos provienen de nuestros alimentos», ha querido aclarar la experta.

La experta ha explicado que «nuestros cuerpos hacen un trabajo increíble al regular nuestros líquidos y nos indican cuándo necesitamos beber al darnos señales de que tenemos sed»: «En términos generales, su cuerpo no decide que tiene sed hasta que haya perdido alrededor del 2 por ciento de su agua corporal. Eso no es mucho y es muy fácil de recuperar bebiendo líquidos».

Aún así, Malik también ha señalado que hay personas que necesitan beber más líquido que otras, como es el caso de aquellas que sufren infecciones frecuentes del tracto urinario. En casos como estos, debe seguir las indicaciones de su médico.

Aunque estar bien hidratado es algo importante para nuestra salud, esta mujer ha subrayado que el consumo de agua debe ser moderado: «A veces, si bebes demasiado, puedes reducir demasiado la sal en tu cuerpo y causar algo llamado hiponatremia, que puede enfermarte gravemente», ha advertido, alertando de los problemas de estar sobrehidratado.