«Tendría que haber ido a una playa»: enorme revuelo en redes por un posado a las puertas de Auschwitz

Esta llegada de turistas a sitios que no están realmente pensados para esta actividad es, en efecto, cada vez más habitual y un nuevo atractivo que muchos buscan y aunque las instalaciones intentan estar preparadas para ello los visitantes no siempre adoptan los comportamientos necesarios en estos espacios especiales.

Por eso que cada vez están surgiendo más polémicas por algunas fotos hechas en espacios turísticos cuyos protagonistas priorizan publicar contenido vistoso en sus redes y que tienen actitudes que mucho ven como irrespetuosas, frívolas o incluso ofensivas.

La historia se ha repetido recientemente en el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau. Ubicado en Polonia, es considerado el más grande de estos centros de exterminio y actualmente se pueden visitar sus distintas instalaciones para conocer la tragedia que se vivió allí desde primera fila. Los visitantes que acuden allí se encuentran, nada más llegar, las vías del tren con las que los convoyes con prisioneros llegaban directamente al interior de las instalaciones nazis.

Es precisamente sobre estas vías donde una joven turista decidió sentarse para que le sacaran una foto como si estuviera realizando un posado de revista, sonriendo y tocándose el pelo. La escena fue capturada por otra turista, que el pasado sábado colgó la imagen en Twitter criticando el hecho. «Hoy tuve una de las experiencias más desgarradoras de mi vida. Lamentablemente, no parecía que todos los presentes lo encontraran tan conmovedor», comentaba indignado la usuaria.

Ella, que se llama María y es británica, ha relatado, ante las múltiples respuestas, que estuvieron en un 'tour' turístico de casi dos horas en las instalaciones, con lo que es imposible que sea una cuestión de ignorancia con lo que se vivió en la zona.

La publicación tuvo un impacto inmediato y, de hecho, ya acumula casi 30 millones de visualizaciones y miles de comentarios. «Tendrían que saber dónde están», le contestaban a ella, mientas otros recordaban que nunca habían visto otro lugar «tan conmovedor». «¿Qué le pasa a la gente?», se preguntaba un usuario, a lo que otro le respondía que el caso se trataba de un «total desapego de la realidad. Esta es la única explicación».

Otros han aprovechado el caso para recordar que en el centro se pide constantemente respeto por las víctimas del Holocausto y que los guías piden explícitamente que no se hagan fotos de este tipo. «Absolutamente asqueroso. Cuando fui, la gente se estaba tomando selfies. Muy irrespetuoso», lamentaba otra visitante.

La cuestión la ha comentado incluso el perfil oficial del Memorial de Auschwitz, que ha respondido que las imágenes tienen un inmenso valor porque «nos ayudan a recordar» pero que «los visitantes deben tener en cuenta que ingresan al sitio auténtico del antiguo campo donde fueron asesinadas más de un millón de personas. Respeta su memoria».