El chef Jordi Roca desvela cuál es la receta de su snack favorito: tan sólo necesita dos ingredientes

Es el caso de recetas como la del salmorejo o el gazpacho, dos de los favoritos de la época estival, que se pueden preparar fácilmente y que refrescan a todos. Además, en muchas mesas también abundan los snacks, que apenas necesitan unos minutos de preparación y que pueden servirnos tanto como aperitivo casual como para una pequeña cena en casa.

Encontrar recetas originales para este tipo de bocados no es tan fácil, aunque los grandes cocineros de nuestro país siempre están dispuestos a dejar sus mejores ideas para la ocasión. Así lo hace habitualmente Jordi Roca, conocido por ser el pastelero del El Celler de Can Roca y también uno de los chefs españoles más prestigiosos del mundo, que suele publicar algunos de sus platos en redes sociales.

En los últimos meses, el catalán ha lanzado una serie de vídeos en su cuenta de Instagram a los que ha llamado 'Cosas de casa', enseñando a hacer algunos de sus platos favoritos. Con estas simples recetas, Roca no sólo deja entrever su destreza para la pastelería, sino también para saber sacar partido de algunos alimentos que son muy fáciles de conseguir y con los que podemos preparar sabrosas composiciones.

En uno de los vídeos que publicó hace unos meses, el cocinero mostró paso a paso cómo podemos realizar un sabroso snack, uno de sus favoritos: las piruletas de queso. Para realizar este sencillo aperitivo como lo hace el cocinero gerundense, tan sólo hacen falta dos ingredientes, un horno y 15 minutos de preparación.

Tal y como ha explicado el propio Jordi Roca, para preparar esta receta es necesario un «taco de galmesano», un queso gallego de pasta dura cocida y de larga maduración cuyo sabor recuerda al del parmesano. No es el único que podemos emplear para este plato, pues también se pueden usar otros como el parmesano o el Grana Padano, que quedan «muy ricos».

Una vez tengamos nuestro queso elegido, debemos rallar parte de él, con cuidado de no hacernos daño en los dedos. Posteriormente, con este ingrediente ya rallado, haremos pequeñas montañas de queso sobre una bandeja de horno y colocaremos unos palitos típicos de brocheta sobre ellas.

Cuando tengamos nuestras piruletas montadas, llevaremos la bandeja del horno, que precalentaremos previamente a 180ºC. Después de cinco minutos a esta temperatura, bajaremos hasta 160ºC y lo dejaremos otros 10 minutos, hasta que estén bien crujientes.

Para finalizar con la receta de este aperitivo y darle el toque ideal, Jordi Roca recomienda ponerle «una pizca de pimentón ahumado» mientras estén aún calientes. «¡Riquísimo! Es súper crujiente», ha calificado el cocinero tras probar la piruleta de queso.