'The morning show'

Trata sobre las luchas de poder y los sentimientos en las cadena norteamericana, ficticia, UBN. En esta temporada, los dos varones que quedaban en la anterior han sido relegados a segundones. Por supuesto el movimiento MeToo siempre está presente. Con actuaciones magistrales de Aniston como Alex Levy y Witherspoon como Bradley Jackson, productoras de la serie en la realidad y presentadores del matinal en la ficción, los capítulos han sido aclamados tanto por la crítica como por el público. No se pierdan a la propietaria cuando dice: «Ya no quieren nuestras vaginas, quieren nuestro dinero». Toda una declaración de intenciones que iguala a los sexos y los pone a la misma altura, la del vil metal.

La serie, con su enfoque sobre la pujanza del cuarto poder, continúa siendo una de las más influyentes, algo que molestará y mucho, al gran lobo blanco, a Trump. Los personajes están llenos de contradicciones, como cualquiera, y las mujeres, en su ascenso hacia la fama y el dinero, se pegan cuchilladas constantes que nada tienen que ver con ese mundo de finas damiselas en las que han querido meterlas los machotes de turno. En cada temporada destaca un caso de investigación periodística, en esta la de una compañía química que con sus vertidos en un río provoca cáncer en mujeres y niños, pero el caso es que un antiguo trabajador de la cadena, el CEO anterior, lo enterró para conseguir puños de mayor envergadura, lo que en el presente va a afear su incipiente historia de amor con una de las presentadoras estrella, Bradley.

Véanla, no les dejará indiferentes.