TRIBUNA ABIERTA
El regreso del dóberman
Porque hasta en el mensaje ha acertado de pleno la presidenta madrileña. Su expresión alternativa, «Socialismo o Libertad», es tan acertada como sintética, porque refleja con pocas palabras la verdadera alternativa política del momento
Luis Marín Sicilia
El 29 de septiembre de 1979 el diario El País titulaba con gran despliegue: «Alfonso Guerra: Si el caballo de Pavia entrara en el Parlamento, Suárez se subiría a su grupa». Tales palabras, aplaudidas entusiasticamente por la militancia, las había pronunciado en su intervención en ... el Congreso extraordinario del PSOE, y seguían la línea de desgaste de la figura del presidente de UCD y del Gobierno de España, a quien ya habían descalificado de todas las formas tildándolo el propio Guerra como «tahúr del Mississipi, con su chaleco y su reloj».
Años después, tras catorce de gobierno socialista, en la campaña electoral de 1996, el PSOE sacó a pasear un vídeo en el que la derecha aparecía retratada por un perro dóberman que representaba la ira y la cizaña que destilaba Aznar, líder del partido de la oposición y candidato a la presidencia del Gobierno, el Partido Popular. En campañas precedentes el socialismo gobernante siempre utilizó, como armas arrojadizas mensajes tenebrosos que inculcaran el miedo a sus contrincantes de la derecha política.
Gracias a una moción de censura proyectada, preparada y articulada con el pretexto de una frase introducida por un juez en una sentencia, frase que fue declarada improcedente por el tribunal superior pero que sirvió al fin perseguido, el maniobrero Sanchez accedió a la presidencia del Gobierno con la promesa de convocar de inmediato elecciones, cosa que no hizo confirmando su permanente fidelidad a la mentira y al oportunismo. Pero si se entregó de inmediato al deporte favorito de la izquierda: la descalificación sistemática de la derecha, ahora con el espantajo de la foto de Colón y de ‘las tres derechas’, todas ellas metidas en el saco de la perversión y de su animadversión a sus pretendidos ‘derechos sociales’.
A veces el juego sucio y el ventajismo produce un efecto purificador y termina volviéndose contra el fullero que lo practica. Este es el caso de lo acontecido con motivo de la moción de censura en la comunidad murciana y en su ayuntamiento, cuyo último desenlace puede revolverse contra sus instigadores. Porque el efecto que dicha moción provocó fue intuido perfectamente por la presidenta Ayuso en Madrid, quien con su olfato político ha puesto en jaque a toda la clase política que debe retratarse ante la ciudadanía a la que representa. Y no hay nada más perjudicial para un tramposo que obligar a todos a enseñar sus cartas.
La consecuencia más importante de lo acontecido, al margen del resultado final, es que la reacción tan acertada de Ayuso va a acelerar algo que venía demandando todo el espectro sociológico del centro derecha español: la articulación de una oferta conjunta de todo lo situado a la derecha de un Pedro Sánchez que basa su manual de acción política en lo que Maquiavelo decía refiriéndose a Alejandro VI: «No hizo jamás otra cosa, no pensó jamás en otra cosa que en engañar a los hombres y siempre encontró con quien poder hacerlo».
Cualquiera que sea el resultado de las mociones y del adelanto electoral, lo más importante es la aceleración que la ambición excesiva de Sánchez ha provocado en la unificación del centro derecha, cualquiera que sea la fórmula en que se articule. Porque hasta en el mensaje ha acertado de pleno la presidenta madrileña. Su expresión alternativa, «Socialismo o Libertad», es tan acertada como sintética, porque refleja con pocas palabras la verdadera alternativa política del momento: potenciación de las facultades de la persona y de la sociedad frente al intervencionismo, la tutela y la imposición de unas políticas identitarias y sectarias. Y una derecha liberal, moderna y centrada no puede, no debe, tener complejos a la hora de debatir frente a una izquierda que solo quiere comprar voluntades con mensajes buenistas y facilones para hacernos dependientes de sus designios falsamente protectores. Como decía Mazarino, «no te fíes nunca de un hombre que lo promete todo».
El ejemplo de Madrid, su visión emprendedora propia de una sociedad abierta, es el mejor camino para el verdadero progreso, el que tiene por protagonista esencial a la persona con su enorme capacidad de superación ante las adversidades. Es esto lo que engrandece a los hombres y a los pueblos, no el proteccionismo exacerbado que es el pretexto para secuestrar a la sociedad. Y en Madrid van a confrontar los dos modelos, el liberal de Ayuso y el PP frente al intervencionista depredador de Sánchez y su PSOE.
La ciudadanía de Madrid es bastante menos manipulable que la media nacional y no se dejará engañar fácilmente por los mensajes que lancen los peones mediáticos del sanchismo, repetidos machaconamente por sus militantes, tertulianos afines y activistas desprovistos de cautela y sobrados de soberbia intelectual poco fundamentada. Está claro que volverá la nueva versión del dóberman, ese depredador de derechos que la izquierda quiere atribuir a la derecha. Pero esa estrategia tiene el inconveniente de querer tomar por idiota a una gente escarmentada por tanto falsos salvadores. Una gente que ya ha comprobado reiteradamente como esa derecha tan maligna ha tenido que salvar al país de la ruina que le han dejado los progres izquierdistas. A los ciudadanos libres no vuelven a engañarlos, por muchos dóberman que resuciten.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete