In memoriam
La última hora
Su espíritu inquieto, su amor por el Betis y, sobre todo, por Sevilla, le llevaron a implicarse en decenas de proyectos para los que siempre tenía tiempo
Pepe Moya ha sido una de las personas más apasionadas y que más ha disfrutado de la vida de cuantas he conocido. Embarcado siempre en nuevos proyectos supo compatibilizar su condición de empresario industrial con su vocación de ganadero, su sueño cumplido. Con un fuerte ... sentido familiar, marcado por la temprana muerte de algunos de sus hermanos, forjó con Concha, sus hijos y sus nietos un núcleo indestructible. Su espíritu inquieto, su amor por el Betis y, sobre todo, por Sevilla, le llevaron a implicarse en decenas de proyectos para los que siempre tenía tiempo. Pero lo que más me impresionó de Pepe Moya fue la forma con la que afrontó la noticia de su enfermedad. Él, que tanto amaba la vida, nos dijo: soy una persona de profundas convicciones cristianas, he conseguido muchas cosas a lo largo de mi existencia y estoy agradecido y preparado para afrontar mi última hora. Nada más. Que Dios lo tenga en su gloria.
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