Vigila el climatizador del coche, donde reside el origen del 35% de las averías

Otra de las averías más comunes son las fugas del gas por desgaste de las tuberías del sistema del aire acondicionado. Concretamente, este tipo de tuberías se vuelven porosas y permiten escapar el gas refrigerado.

La no sustitución de los filtros antipolen cada 2 años o 12.000 kilómetros también tienen su protagonismo, ya que su función es prevenir y detener la entrada exterior del polvo, restos de hojas, pequeños insectos y un largo etcétera de partículas que se encuentran en suspensión en la atmosfera.

Además, para vehículos de utilización en zonas costeras, factores como la humedad y salinidad pueden contribuir negativamente a la corrosión de los mecanismos del aire acondicionado y del climatizador.

Generalmente, un uso agresivo y no gradual del sistema por parte del propietario del vehículo, en que se fuerza a trabajar a altos niveles de temperatura, ocasiona averías a medio plazo en el compresor , algunos sencillos consejos para optimizar su funcionamiento y alargar su vida son seleccionar temperaturas intermedias y durante tiempos prolongados, y hacer uso del rango de temperaturas del climatizador tanto en verano como invierno, es decir, accionar el funcionamiento tanto de frio o calor a lo largo del año independientemente de la estación del año .