Las claves del 'boom' de las marcas chinas de coches

Además de la oferta cada vez más amplia de modelos, el precio más asequible se erige como uno de los principales condicionantes que está convenciendo cada vez más a un número mayor de conductores de nuestro país.

De hecho, sirva como ejemplo el precio del coche chino más vendido en España -el MG ZS, que cuesta 17.930 euros-, cuya tarifa es hasta un 26% más barata que el coche europeo equivalente más vendido -el Peugeot 2008, que cuesta 24.190 euros-.

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Pero además del precio, las marcas chinas cubren todo el espectro del mercado, es decir, son capaces de cubrir las más variadas y necesidades de todos los posibles tipos de conductores, con una variada oferta de coches asequibles, coches medianos, modelos de alta gama, etc., cubriendo nichos que otros fabricantes se han visto forzados a abandonar por diversos tipos de factores, como la de adaptación de su gama a las normas de emisiones contaminantes o la electrificación acelerada que están llevando en su portfolio de vehículos, un factor que está teniendo diversos problemas de 'convivencia' con su planteamiento de negocio y las tecnologías tradicionales de propulsión, es decir, los motores diésel y gasolina de toda la vida.

Por otro lado, hay que incidir en que las marcas chinas son punteras en electromovilidad, un tipo de tecnología que han venido desarrollando y perfeccionando desde hace más de diez años. De hecho, algunas de las marcas chinas, como es el caso del gigante BYD -en noviembre 2023 tenía 14 modelos electrificados- es el 2º fabricante mundial de baterías tras CATL, lo que supone, por tanto, una ventaja competitiva que se traduce en coches con un precio más ajustado que el de las marcas europeas.

Por su parte, muchos de los coches chinos que se venden en Europa están a la altura e, incluso en algunos casos, los superan, a sus homólogos europeos en factores clave como la seguridad y el nivel de calidad del producto. De hecho, todos los vehículos de marcas chinas que se sometieron a las pruebas de choque del organismo independiente Euro NCAP a lo largo de 2023 y de este 2024 en nuestro continente obtuvieron la máxima puntuación de 5 estrellas, demostrando que son igual o más seguros que sus rivales occidentales.

A los factores anteriores, hay que añadir otro sumamente importante, como es el hecho de que la gran mayoría de marcas chinas están asentadas en una red postventa cada vez más sólida y extendida, con importadores de primer nivel que apuestan principalmente por el modelo de distribución tradicional (algo, no olvidemos, que gusta mucho en el mercado, pues al usuario le gusta ir físicamente al concesionario para ver, tocar y conducir el modelo que puede ser su próximo coche).

En los últimos tres años, el número de fabricantes procedentes del gigante asiático se ha multiplicado por tres en nuestro país, pasando de 8 en 2021 a 23 en 2024, según AutoScout24, el especialista en vehículo de segunda mano de Sumauto, a partir de datos de Ideauto.

Esta mayor disponibilidad de marcas chinas de coches ya se está reflejando en el número de ventas registradas hasta rozar los 37.000 vehículos matriculados en el periodo de enero a octubre de 2024, lo que supone una cuota de mercado del 4%. Aquí, el Top 5 de fabricantes chinos con más matriculaciones registradas son MG (24.602 unidades), Omoda (5.897), BYD (3.249), Lynk & Co (1.132) y Polestar (506).

Matriculaciones que en su gran mayoría tienen como origen final el usuario de a pie, es decir, el cliente particular, pues la práctica totalidad de las ventas registradas por MG, Omoda y BYD en España tienen nombre y apellidos de personas físicas. A estos tres fabricantes, hay que unir la reciente y fuerte irrupción de otra marca china, Jaecoo, que con un único vehículo ha logrado matricular 313 unidades durante su primer mes a la venta (octubre), superando a otras marcas ya asentadas y con una mayor trayectoria en nuestro país como Mitsubishi (267 unidades), Land Rover (207) o Subaru (163).

Todo ello en un contexto con una mayor competitividad con muchos más actores internacionales, pues en 2021 se contabilizaban hasta 61 fabricantes, frente a los 77 de 2024, por lo que los conductores tienen ante sí una cada vez mayor oferta ya no sólo de modelos, sino de marcas. Y seguirá creciendo.

De hecho, a corto plazo el mercado continuará recibiendo a nuevos participantes procedentes del gigante asiático, como los recién llegados Leapmotor, XPENG, Jaecco y Dongfeng -que vende la friolera de 15 vehículos electrificados a nivel mundial- a los que se sumarán en 2025 nuevas marcas como IM, NIO, Zeekr y Arcfox, entre otras.

Según Ignacio García Rojí, portavoz de AutoScout24: «el mercado del automóvil en Europa está ante un momento apasionante con la participación de múltiples actores que, ahora sí, están cubriendo todos los posibles gustos y necesidades que pueden tener los conductores. En el caso de las marcas chinas, su amplia y variada gama de modelos electrificados está permitiendo a muchos usuarios conocer una tecnología más sostenible y diferente a la convencional. Sobre los aranceles, consideramos que no es bueno imponer normas restrictivas, pues ha de ser el propio mercado el que dicte sentencia.»

Con una oferta cada vez más amplia y con modelos de todo tipo, que está teniendo como resultado su crecimiento en el mercado europeo, ante la preocupación de los fabricantes europeos Bruselas ha movido ficha imponiendo medidas proteccionistas, en este caso, la imposición de aranceles a las marcas chinas de coches. Un movimiento, sin duda, que está causando una gran controversia en la industria y cuyo objetivo, según declaran desde las altas esferas, es contrarrestar los incentivos «ilegales» del Gobierno de China a sus productores de vehículos eléctricos, que les otorgan una ventaja desleal frente a sus competidores de Europa.

Así, se aplicará un arancel del 35,3% al fabricante SAIC (que integra a MG y Maxus, entre otras marcas), del 18,8% a Geely y del 17 % a BYD, durante un máximo de cinco años. Esta medida también afectará a empresas occidentales que producen en China, como Tesla, a quien se va a aplicar un arancel del 7,8 %.

Ante la imposición de estos aranceles, muchos de los fabricantes chinos ya han anunciado sus planes de implantar una o más fábricas en algún país europeo, como son los casos de MG, BYD, Dongfeng Motor o Chery, entre otros. Así, al disponer de una fábrica, muchas de estas compañías dejarían de pagar estos aranceles.