Quién es Ana Mena: un exnovio del Real Madrid, su cambio físico y el negocio que ostenta fuera de la música

El crecimiento de la artista malagueña se entiende en millones y millones. Su último single, 'Carita triste', junto a Emilia Mernes, acumula en apenas un mes más de 8 millones de reproducciones en YouTube, aunque este no ha sido el único temazo de la española. Mena ya triunfó hace unos meses con canciones como 'Madrid City', 'Las 12', 'Mezzanotte' o 'Música Ligera', que todavía siguen sonando a día de hoy.

La vida de la de Estepona ha cambiado mucho desde que se dio a a conocer al público nacional tras ganar el concurso 'My Camp Rock 2'. Sin embargo, el mundo musical no es la única aventura profesional en la que se ha embarcado la de Estepona. La artista, de 27 años, ya probó suerte en el mundo del cine de la mano de Pedro Almodóvar y su 'La piel que habito' y ahora regresa para protagonizar un filme junto a Óscar Casas. Se trata de 'Ídolos', una coproducción entre España e Italia, dirigida por Mat Whitecross, que promete ser la sucesora de 'Tres metros sobre el cielo'.

Conocemos muy bien su vida profesional, pero ¿qué hay del lado más personal de Ana Mena? Te contamos todo lo que debes saber sobre la artista malagueña que arrasa en la música española.

Proveniente de una familia humilde, la influencia de su madre fue una de las claves para que Ana Mena (Estepona, 1997) se dedicara a la música. La progenitora de la malagueña solía cantar flamenco en su hogar, algo que le transmitió a su propia hija, que mostró su talento para conquistar los escenarios desde bien pequeña: «La primera vez que me recuerdo yo cantando en público fue en una boda. Yo tenía siete años y era la boda de mi tía. Nadie de mi familia sabía que yo cantaba. Nadie. Me puse un traje de flamenca de mi madre cuando era niña. O sea, antiquísimo. Y canté una canción de la Niña Pastori. Y ese es mi primer recuerdo musical mío cantando», recordaba en una entrevista en Los 40 Principales.

Desde entonces, su carrera ha estado marcada por el éxito: ganó el concurso 'Veo, veo', protagonizó la serie sobre Marisol y venció en 'My Camp Rock 2', donde se ganó el cariño de gran parte del público español. Sin embargo, poco queda ya de aquella niña que conquistó los corazones de muchos espectadores en su país y que, a día de hoy, luce irreconocible por su impactante cambio físico. Muchos han achacado estos cambios visibles a las técnicas de maquillaje, aunque algunos expertos aseguran que la cantante malagueña se ha hecho algunos retoques estéticos para mejorar su apariencia física.

Uno de los cambios más notables es el de su nariz, mucho más fina, con un perfil más recto y con la punta más retraída y elevada, lo que podría ser debido a una rinoplastia completa. También sus ojos, que lucen más estirados y menos redondos, lo que podría deberse a haber pasado por una blefaroplastia completa para retirar la piel sobrante del párpado.

Además, los labios de la cantante también han cambiado, por lo que podría haberse decantado por unas sesiones de infiltración de ácido hialurónico para aportar volumen e hidratación a sus labios.

Poco se sabe en realidad sobre la vida amorosa de Ana Mena, que siempre ha sido muy discreta en lo que al corazón respecta. Desde que saltó a la fama, la cantante jamás ha confirmado una relación, aunque se la ha relacionado en multitud de ocasiones con rostros famosos, como es el caso de su compañero de profesión Abraham Mateo o, más recientemente, el tenista murciano Carlos Alcaraz.

Con el que sí se dejó ver en alguna que otra ocasión fue con el futbolista Brahim Díaz, actual jugador del Real Madrid, con el que se apunta a que mantuvo una relación hace varios años. Así lo desvelaba en exclusiva la revista «Hoy Corazón», en la que publicaban unas íntimas imágenes de la cantante disfrutando de una tarde en el cine junto al mediocentro hispanomarroquí.

La ciudad natal de ambos, Málaga, habría sido el principal motivo de unión de la pareja, aunque ninguno de los dos llegó a confirmar nunca si entre ellos había algo más que un idilio. En su momento, la cantante desmintió que tuviera una relación con el futbolista, desmarcándose de las fotografías con actitud cómplice, y admitió que estaba soltera: «Me lo tomo a risa. Si es verdad se dice y si no es verdad, también. No tengo ningún problema en responder naturalmente», aseguró entonces.

Poco después, el jugador blanco acabaría confirmando la relación con su actual pareja, la actriz canaria Luz Méndez, poniendo así punto y final a los rumores que apuntaban a una relación con la estrella musical.

Por su parte, a la malagueña se la relacionó durante un tiempo con un compañero de profesión, el cantante Abraham Mateo, con el que sólo hay una buena amistad y una exitosa colaboración. Eso sí, aunque aún no ha encontrado al hombre de su vida, sí tiene claro lo que no quiere en una pareja: «Que no pare de hablar de su expareja. Eso no pega mucho, como tampoco que no se lleve bien de su familia. Eso no me gustaría. Que su Instagram esté lleno de mujeres a las que sigue, que trate mal al personal que le atiende. Y tampoco que esté mirando el móvil durante toda la cena», contó en su última visita a 'El Hormiguero'.

Además de ser una de las grandes artistas de su generación en España, Ana Mena cuenta también con otros negocios a sus espaldas algo más desconocidos y muy relacionados con su tierra. Y es que la cantante malagueña siempre ha presumido de sus raíces y de su Estepona natal y eso también lo ha llevado al ámbito empresarial.

Según mostraba hace unos meses en su cuenta de Instagram, la joven, orgullosa del sur, cuenta con su propia marca de aceite de oliva, hecha a base de las aceitunas que cultiva dentro de su propia casa. «Aceite de oliva virgen de las aceitunas de Ana Mena» dice la etiqueta de la garrafa publicada por la joven cantante, que presumía de este negocio en sus redes sociales.

Además de esto, Ana Mena también cuenta con una sociedad para la «creación, producción, coordinación, dirección, organización y/o realización de eventos musicales, teatrales, literarios, reuniones, convenciones, coloquios, congresos, ferias y eventos artísticos de todo tipo, así como la explotación comercial y publicitaria de todo tipo de actuaciones».