La vida personal de Omar Montes: marcado por la pobreza y el acoso escolar en la infancia a su salto a la fama

Esta noche el cantante cierra la semana en 'El Hormiguero' y acude de nuevo al programa de Pablo Motos para presentar su nuevo tema: 'Goteras', interpretado junto a JC Reyes, y que ha alcanzado casi los cincuenta millones de reproducciones en Spotify.

Montes, de 36 años, y nacido en el barrio madrileño de Carabanchel ha conseguido quitarse la etiqueta de televisivo -se dio a conocer como novio de Isa P., la hija de la tonadillera Isabel Pantoja y ha participado en concursos como 'Supervivientes- así como la de polémico por diversas actitudes mostradas en redes y televisión.

Cantante, boxeador, actor o modelo han sido algunas de las facetas en las que ha centrado su vida pública desde que es conocido. Sin embargo, el camino de Omar Montes para convertirse en lo que es hoy y por lo que le reconocen no ha sido fácil.

Su infancia estuvo marcada por la pobreza, la delincuencia a su alrededor y el acoso. Como contó el madrileño en su documental 'El Principito' se crió en el barrio de Pan Bendito en unas «chabolas» con su madre y sus abuelos.

De esa época recuerda que «algunos días, si comías no se cenaba». Además, ha reconocido en alguna ocasión que su madre trataba de conseguir toda la ayuda posible aunque, como ellos, en su barrio también había mucha gente necesitada por lo que no siempre lo lograba.

En una ocasión confesó a Paz Padilla que le bañaban en un «barreñito azul» donde todos le veían. Durante su ascenso a la fama, a Montes también se le ha caracterizado por presumir de coches, relojes, joyas y dinero.

Ahora ya no da tanta importancia a esas cosas, como él mismo ha reconocido. En una entrevista en 'La Vanguardia' explicó que lo que le «llena más que cualquier cosa» es que su madre ha podido dejar de trabajar: «Lo que mola de verdad es que quites a tu madre de fregar escaleras». Asegura que los Rolex ni se los pone y sale con lo primero que tiene en el armario.

Su infancia también estuvo marcada por el acoso escolar. Pasó una época acomplejado por su físico: «Tenía factores en mi contra: el racismo, estaba gordo… Me perseguían… Lo pasé fatal, se metían conmigo todo el rato». En una de las anécdotas cuenta de esa época es la de un empujón cuando trataba de recuperar un balón mientras escalaba una tapia por el que quedó insconsciente algunos minutos.

Ahora, anima a «plantarle cara al agresor» y «pedir ayuda» porque hacerlo «no es de cobardes».

Entre concursos de televisión como 'Gran Hermano', 'Supervivientes o 'Mujeres, Hombres y Viceversa', poco a poco dio a conocer su música que le ha llevado incluso a actuar en la final de la Copa del Rey. Su carrera musical le ha llevado colaborar con Saiko en 'Yo lo soñé', La Zowi con 'Victimista' o Ana Mena y Maffio con 'Solo'.