¿Qué enfermedad tiene Frank Cuesta?

En la actualidad, Frank Cuesta asegura no tener miedo a la enfermedad, aunque admite que no le gusta hablar mucho sobre ella. «Llevo 17 años con esto. Al principio fue un golpe muy duro, pero luego te das cuenta de que puedes quedarte en casa llorando por la pena o decidir pelear. No tengo miedo», afirmó. En una entrevista con la revista QMD, el youtuber explicó: «Lo que tengo es una enfermedad de la sangre, y así se entiende. Puedo decir cáncer o leucemia, pero me da igual. Al final del día, estás enfermo y punto».

La leucemia que sufre el youtuber es una forma agresiva de cáncer en la sangre que implica un rápido crecimiento de células anormales en la médula ósea, lo que interfiere con la producción de células sanguíneas normales. Este tipo de leucemia progresa con rapidez, requiriendo un diagnóstico temprano y tratamientos intensivos, como quimioterapia, inmunoterapia o trasplante de médula ósea.

«Sabéis que yo tengo una especie de enfermedad ahí mentida dentro durante muchos años y estoy haciendo un tratamiento alternativo durante los últimos cuatro años y hoy comienza», comentaba recientemente Frank en su canal. «Todos los enero me tienen que meter un mogollon de cosas ahí por la médula y hacer unas cosas». Es por esto que el espeleólogo reconoce que «me he estado engordando porque sé que voy a bajar peso, entonces aunque veáis que bajo peso, o que se me cae el pelo o algo así, es una cosa normal y no es que me esté muriendo ni que me esté pasando algo», explicó a sus seguidores.

Ya en su momento reconoció que «esto es solo un obstáculo más en el camino, como tantos que he enfrentado en la selva y fuera de ella. Pero no voy a rendirme». Frank ha utilizado su plataforma para generar conciencia sobre la leucemia y la importancia de la detección temprana y ha animado a sus seguidores a realizarse chequeos médicos regulares y a valorar la salud como un regalo que no debe darse por sentado. «Me di cuenta de que muchas cosas no merecían la pena. No merecía la pena el poder, el dinero, el tener... merecía la pena el vivir».