La romántica historia de amor de Garbiñe Muguruza y Arthur Borges: se conocieron en plena calle

«Estoy muy contenta de compartir con vosotros este momento porque es muy bonito y porque no solo hay que celebrar siempre los trofeos, sino también este lado más humano de los deportista», explica la joven en la revista '¡Hola!'. Muguruza sabe de sobra lo que es saborear las mieles del éxito en el plano profesional y ahora está dispuesta a hacerlo en el personal. «Buena suerte en el US Open», fueron las palabras exactas que le dijo Borges a la tenista nada más verla: «Fue realmente un flechazo a primera vista, porque desde el primer momento tuvimos una atracción».

La tenista está encantada con tener una profesión que dista mucho de la de su prometido: «Yo no sabía nada de él y me gustó mucho que fuera de otro mundo, pertenece al mundo de la moda y el lujo. No forma parte del tenis y para mí fue algo importante, que no todo sea tenis en mi vida». Algo que sumado a lo guapo que le pareció propició que casi todos los días fueran a pasear, juntos, al Central Park. Y ese momento en el que se conocieron lo guardan con especial cariño: «Me pidió una foto y ahora tenemos la foto del momento exacto en que nos conocimos enmarcada».

La pedida de mano no fue como ese primer encuentro pero Garbiñe asegura a dicha cabecera que hincó rodilla: «Sí, sí. Yo soy tradicional, así que tenía que ser todo un caballero». El hotel Marbella Club -uno de los favoritos de la deportista- fue el escogido para ese momento: «Cuando me lo propuso, me puse a llorar, no sabía cómo reaccionar. Le dije que sí entre lágrimas de emoción y todo fue muy romántico».

Pese a que aún no tienen una fecha fijada, la pareja quiere sellar su amor en 2024: «Tenemos que decidir el lugar también, muchas cosas, pero no me he puesto todavía a ello, la verdad». Aunque tienen sus preferencias claras: «Me gusta el buen clima, quiero verano y sol, quiero cerca de la playa y quiero España porque es el sitio adecuado, el que más nos une también». También que su deseo es que sea «una boda íntima» en la que solo estén presentes los más cercanos.

A Muguruza lo que más le gusta del modelo es su paciencia y que tenga un gran sentido del humor. Además, el hecho que sea un hombre «atlético y deportista», que tenga un gran estilo y que sea «guapísimo» ha hecho que esté plenamente enamorada de él. También la gran conexión que tuvieron desde el primer momento. «Los dos encajamos bien y convivimos bien desde el primer momento, es como si nos conociésemos de antes».