Suscribete a
ABC Premium

Alejandro Sanz responde a las acusaciones de una fan: «Yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos»

El cantante afirma que le ofreció invertir en unos negocios de su familia

Una fan acusa a Alejandro Sanz de conductas inhumanas y espionaje: «Conmigo se ha equivocado hasta el final»

Alenajdro Sanz en una imagen de archivo GTRES

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Apenas dos días después de que una fan lo acusara de conductas inhumanas y espionaje, Alejandro Sanz se ha pronunciado este martes sobre las palabras Ivet Playà, que habló de una eventual historia entre ambos que empezó como un sueño y terminó convirtiéndose en una «terrible pesadilla».

«Ivet, yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora», ha escrito el cantante en una historia de Instagram. En la publicación, el artista madrileño criado en Cádiz afirma que la joven le ofreció el pasado mayo invertir en unos negocios familiares suyos: «Tras revisarlo con mis abogados, te dije que no».

«Siento que tu reacción sea esta, pero quiero que sepas que nunca he sido partícipe de estas prácticas y así seguiré toda mi vida. Te deseo encuentres tu camino y felicidad», concluye el cantautor.

Playà narró hace dos días en un vídeo de Instagram y TikTok su versión sobre su relación con Alejandro Sanz, al que ha acusado de «jugar con sus sueños». La joven catalana detalló que el cantante comenzó a seguirla en redes sociales hace años, donde «comentaba sus fotos» e incluso, dijo, publicaba cosas suyas en sus perfiles.

Esta fan explicó que ambos quedaron por primera vez cuando ella tenía 18 años y que, cuando tenía 22, se mudó de Barcelona a Madrid porque el artista la contrató para trabajar para él. «En esa época, no sé realmente el motivo, pero nos espiaban las conversaciones que manteníamos por privado», señalaba ella en el vídeo.

«Mi vínculo personal con Alejandro Sanz fue irremediable y se convirtió en íntimo y sexual. Se suponía que estaba viviendo un sueño, un sueño más de su mano, pero la realidad es que se convirtió en una terrible pesadilla», lamentaba.

En cuanto los motivos de la decisión de pronunciarse ahora, afirmaba que con ella «no se firmó ningún papelito» y sentía la «responsabilidad moral» de denunciar lo ocurrido: «Ya no soy esa niña que estaba dispuesta a todo para estar más cerca de él. La Ivet de hoy sabe lo que es un vínculo sano, proporcional y recíproco. Y reconoce cuándo alguien hace las cosas con el corazón y cuándo alguien se siente tan vacío por dentro que solo se siente bien utilizando el corazón de los demás».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación