Tamara Falcó, o cómo pasar de 'socialité' a icono de estilo consolidado

Pero más allá de ser una cara bonita, si por algo se caracteriza Tamara Falcó es por tener siempre un proyecto entre manos, aunque la moda es sin duda a la que más tiempo y esfuerzo le dedica. Y no es para menos, ya desde muy joven supo que se quería dedicar a ello y cursó la carrera en el Instituto Marangoni de Milán , uno de los más prestigiosos del mundo, y posteriormente un máster de Fashion merchandising en el ISEM Fashion Business School .

Sin embargo, no fue hasta 2018 cuando se atrevió a dar el gran salto y fundar su propia marca, TFP by Tamara Falcó. Una firma que materializaba su espíritu romántico e ingenuo con prendas sofisticadas pensadas especialmente para ser lucidas en eventos.

Desde que la creó solo salieron tres colecciones, lo que hizo que muchos desconfiasen de que pudiera seguir adelante, pero en febrero del pasado año decidió darle un giro con una imagen más fresca y juvenil en la que no han faltado las altas dosis de color y las terminaciones ultra elaboradas con bordados, encajes y demás detalles sofisticados.

Según ha contado ella, su amistad con el diseñador Juan Avellaneda le cambió la vida en muchos sentidos, desde ayudar a que se sintiese mejor consigo misma a aprender algunas nociones de diseño, lo que hace que muchos se pregunten si esta ha sido una de las causas por las que su colección refleja ahora alegría y glamour.

En cuanto a los puntos fuertes de la aristócrata, destacan por un lado su pleno conocimiento de las reglas del juego, ganado tras haber trabajado en diferentes ámbitos (el último, la cocina, pues acaba de graduarse en ‘Le Cordon Bleu’ ); y por otro, su simpatía y naturalidad, que han contribuido a que se meta en el bolsillo a media España con su desparpajo.

En lo personal, vive su momento más dulce junto al ingeniero Íñigo Onieva, con quien lleva saliendo desde septiembre de 2020 además de haber dado el paso y adquirir su propio apartamento en una de las urbanizaciones más exclusivas de la capital.

Dejando a un lado sus logros profesionales y su vida amorosa, no se puede perder de vista su particular estilo, que sirve como referente a muchas mujeres y que podría definirse como u n vestidor de aires 'vintage' en el que tampoco faltan los básicos con alguna que otra prenda más 'preppy'.

Falcó apuesta por el sello español con firmas como Jorge Vázquez, Teresa Helbig o su gran amigo Juan Avellaneda, que combina con otras marcas internacionales como Valentino, Carolina Herrera, Oscar de la Renta o Chanel. También confía en las firmas de autor que ofrecen diseños muy personalizados, como Rouje, de la modelo Jeanne Damas, o la catalana PJ by Paula Junyent, por citar algunas.

Pero no todo es lujo en su armario, pues también cuenta con prendas de Inditex -tanto Zara como Uterqüe -, a las que suele recurrir cuando busca configurar un estilismo de básicos.

Y hablando de prendas todoterreno, aunque las faldas y vestidos midi son su alternativa favorita, tampoco faltan los vaqueros de corte recto y con talle alto que suele combinar con blusas románticas con volantes y adornos, o por el contrario tops de punto con asimetrías.

En cuanto al calzado, además de los 'stilettos', últimamente suele lucir botas de montar a caballo y deportivas, entre las que destacan las Nike Air Force 1 Shadow.

Falcó también es experta en sacar el máximo partido a los complementos y nunca prescinde de sus joyas. También es partidaria de combinar la mascarilla con su look, a lo Olivia Palermo, y siempre que puede lucir algún que otro accesorio en el pelo. Pero sin duda la clave de su éxito reside en la seguridad con la que luce todo, hasta las tendencias más arriesgadas.