El PSOE impone la comparecencia de Sánchez por el caso Cerdán el 9 de julio y el PP pide que sea el jueves

Este martes, en la reunión de la Junta de Portavoces, que se ha acercado a la hora de duración en medio de una gran tensión, el Grupo Parlamentario Socialista ha frustrado la posibilidad de que se modificase el orden del día del pleno de esta semana para que Sánchez tuviese que comparecer este miércoles o este jueves. El artículo 67.4 del Reglamento del Congreso establece que por razones de necesidad y urgencia, la Junta de Portavoces puede acordar incluir un asunto en el orden del día prestablecido, pero siempre que haya unanimidad. Según distintas fuentes presentes en la reunión consultadas por ABC, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, ha anunciado nada más iniciarse la cita, sin escuchar los argumentos de los partidos, que no iba a concitarse ese 'quorum'.

Los socialistas llegaban pues al encuentro con la decisión tomada de impedir una comparecencia urgente de Sánchez, a pesar de que él mismo se comprometió públicamente este lunes, tras la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, con acudir a la Cámara Baja en la primera fecha posible. El Grupo Parlamentario Popular ha defendido que esas explicaciones se sustanciasen este miércoles o este jueves, con la modificación del orden del día, pero según ha explicado su portavoz, Miguel Tellado, en rueda de prensa, la negativa socialista ha cortado de raíz ese plan. «Lo que dijo de comparecer lo antes posible era una bola, un bulo. Es un forajido, huye del control en las cámaras», se ha quejado el portavoz del PP.

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Según Tellado, Bildu ha secundado al PSOE y Sumar ha mostrado «tibieza», aunque fuentes parlamentarias de otros grupos dicen que el único que se ha negado a que la comparecencia fuese esta semana ha sido el propio Grupo Parlamentario Socialista. Fuentes aberzales reconocen que su coalición veía «precipitado» llamar a comparecer al presidente este miércoles, con menos de veinticuatro horas de antelación, pero apuntan que, igual que el resto, creen que la alternativa ofrecida por el Ejecutivo no es aceptable.

Y es que el Gobierno ha informado de la voluntad de Sánchez de comparecer el 9 de julio, porque en las dos próximas semanas tiene viajes internacionales. Tanto desde los socios como desde el Grupo Socialista, además, se da por hecho que acumulará otros asuntos como la cita de los próximos Consejos Europeos. Es decir, el presidente no dará explicaciones por el caso Cerdán y otros temas como los audios de la exmilitante del PSOE Leire Díez, en los que ofrecía tratos de favor con la Fiscalía a empresarios presuntamente corruptos a cambio de información sensible contra miembros de la UCO, hasta dentro de tres semanas, y en una macedonia de asuntos pendientes.

Vox, ERC, Junts, PNV y Podemos han respaldado al PP en su petición de que Sánchez comparezca esta semana, y no el 9 de julio, y eso ha dado pie a Tellado, ya en plena Junta de Portavoces, para anunciar que su grupo iba a solicitar una reunión extraordinaria de este órgano para reclamar a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, la convocatoria de un pleno extraordinario. «Esperamos que Armengol no vuelva a hacer trampas. Plantearemos un pleno monográfico para que Sánchez venga a dar explicaciones», ha incidido el diputado popular.

Lo que sí ha aceptado el PSOE, tras suspenderse la cumbre de Naciones Unidas en Nueva York sobre el conflicto en Oriente Próximo a la que iba a asistir Sánchez, es que este miércoles, en la sesión de control, los grupos sustituyan preguntas para poderle formular las tres habituales al presidente. Todas estarán centradas en la corrupción y se las harán el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, el líder de Vox, Santiago Abascal, y el portavoz del Grupo Parlamentario Republicano en el Congreso, Gabriel Rufián. De hecho, esto ha servido al portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso, Patxi López, para rechazar las acusaciones de Tellado y defender que el jefe del Ejecutivo cumple.

Esto no convence en absoluto a sus aliados. Ni siquiera precisamente al único que podrá preguntar este miércoles a Sánchez, como ha dejado claro en redes sociales. «Nos dicen que el presidente del Gobierno no puede comparecer ya en el Congreso porque 'tiene que cumplir con su agenda internacional'. Deberían entender que para seguir cumpliendo con esa agenda internacional debe seguir siendo presidente del Gobierno», ha escrito Rufián.

La portavoz del Grupo Plurinacional Sumar en la Cámara Baja, Verónica Martínez Barbero, ha justificado que el presidente no comparezca este miércoles, pero le ha pedido «un esfuerzo» para que sea «cuanto antes» y no el 9 de julio, fecha que les parece demasiado lejana. Eso sí, «entendiendo que esta semana no podía»: «Sigue siendo el presidente del Gobierno y tiene una agenda que cumplir. Dentro del respeto a esa agenda, sí le pedimos un esfuerzo y que no esperemos al 9 de julio para esa comparecencia».