Así han sido las campañas electorales de este 26-J

Partido Popular

El Partido Popular ha mejorado respecto al 20-D en un aspecto fundamental: la imagen que proyecta de su líder. Mariano Rajoy ha conseguido durante los quince días de campaña presentarse como un hombre norma l, de a pie. La caravana del PP ha tenido mucho actos, ha recorrido muchos puntos del mapa nacional y, además, ha incidido en sus puntos débiles : zonas rurales y pequeños municipios con el objetivo de recuperar el voto que más favorece a los populares.

Más allá de los actos, la presencia de Mariano Rajoy en programas televisivos han permitido ver otra cara del líder del PP. Actos tan cotidianos como hacer una hora de ejercicio todas las mañanas o leer prensa deportiva han naturalizado al presidente en funciones. Además, acudir al debate a cu atro –tras la polémica del debate y el cara a cara con Pedro Sánchez en la anterior campaña– le ha supuesto la valoración positiva de la ciudadanía, que en gran parte le consideró como vencedor del cruce entre candidatos.

Los vídeos y presencia en redes sociales también han sido constantes y el PP ha calibrado los mensajes de campaña de forma inteligente. Aunque esta campaña del PP ha mejorado respecto a la de las pasadas elecciones tiene un pero: la falta de innovación o de auto revisión a la hora de presentar su programa electoral. El PP apenas ha incluido cambios y sus propuestas se han fundamentado en las que ya plantearon el 20-D. Lo que sí han hecho es apelar al voto útil y, sobre todo, buscar en el votante fugado a Ciudadanos un aliado en este 26-J.

PSOE

Los socialistas, y Pedro Sán chez , iniciaron esta campaña bajo una premisa: explotar el papel del secretario general del PSOE durante la sesión de investidura fallida el pasado mes de marzo. El pacto con Ciudadanos ha sido otra de las bazas a la que Sánchez ha recurrido para reclamar su papel como líder del «cambio».

Sin embargo, las intenciones de Sánchez han quedado opacadas por la campaña de Podemos. Los socialistas han ido a la cola de la formación morada en su discurso. Tampoco los resultados de las encuestas han favorecido a la campaña del PSOE; el «sorpasso» ha estado al acecho durante los días previos a las elecciones y ha hecho mella en la moral de los socialistas.

Además, la sombra de la división interna y la cuestión del liderazgo de Pedro Sánchez han sido constantes durante esta campaña. La duda del resultado electoral y sobre el futuro del líder de los socialistas han sido temas que han ocupado gran parte de la atención del electorado durante esta campaña.

Como aspecto positivo hay que resaltar la forma en la que el PSOE ha planteado esa campaña, que ha estado repleta de actos para acercarse a los ciudadanos. Acciones como pedir el voto a puerta a puerta o las llamadas masivas por parte de los voluntarios han sido estrategias puestas en marcha por los socialistas.

Unidos Podemos

La campaña de Unidos Podemos se puede resumir con una palabra: indefinición . La confluencia de varios partidos en una sola lista ha tenido como consecuencia la multiplicidad de discursos que, en ocasiones, han resultado contradictorios entre sí.

Podemos ha pasado a autodenominarse socialdemócrata, mientras que su compañero de lista, Izquierda Unida, no ha hecho otra cosa que reivindicar su identidad comunista. Por otra parte, el discurso respecto a Cataluña ha vuelto a tener protagonismo. Un protagonismo que ha hecho que la formación llegue a plantearse no tratar la cuestión del referéndum en caso de tener que pactar con el PSOE.

Además, la moderación de Podemos ha llegado incluso al discurso o a la exposición de Pablo Iglesias en actos de campaña, que ha sido mínima. Iglesias ha focalizado su presencia en televisión –solo ha acudido a seis mítines–, mientras que la imagen de Íñigo Errejón se ha visto potenciada. Lo mismo ha ocurrido con Alberto Garzón , que ha ganado protagonismo desde la unión con Podemos.

Otro de los puntos fuertes de esta campaña ha sido el uso de las redes sociales y los vídeos electorales. Su página de Youtube ofrece los actos completos y los spots electorales, y lo mismo ocurre con las cuentas de Izquierda Unida y Podemos. Algunos de ellos cuentan con caras conocidas como la actriz María Botto .

Ciudadanos

La formación de Albert Rivera ha fundamentado su campaña en actos pequeños. Unos 17.000 kilómetros en los que no ha habido sorpresas . Sin discursos previos, Ciudadanos ha revertido uno de los errores más sonados de su anterior campaña: no ser agresivos con Podemos.

Albert Rivera, como Pedro Sánchez, también ha explotado su papel durante la investidura pasada y el pacto con el PSOE. En sus actos de campaña siempre ha seguido el mismo esquema: dedicar unos minutos a algún sector de la ciudad en cuestión para después exponer los puntos fundamentales de su programa.

Ciudadanos ha sido el partido que menor uso ha hecho de los vídeos y recursos tecnológicos durante la campaña, lo que le ha hecho perder protagonismo allí donde surge la conversación. Es decir, en las redes sociales. Al contrario que el resto de partidos, Ciudadanos solo ha publicado un vídeo de campaña. También ha sido muy criticado por no dejar intervenir a los líderes regionales en muchos de sus actos y su campaña, salvo en momentos puntuales, no ha llamado mucho la atención . Algo que contrasta con el protagonismo que tuvo durante la campaña del 20-D.